¡La Muerte de la Compasión!

Una madre adicta al crack asesin a su propia hija de seis aos de edad, Elisa, sofocndola con una almohada.

Nadine, de cuatro aos de edad, muri de hambre en la casa de su madre en el Bronx. La polica encontr a la nia encerrada en un dormitorio arrugada, enflaquecida, encogida en posicin fetal. Todos sus gritos por ayuda fueron desatendidos por su madre adicta al crack.

Una madre de veinte aos llev a sus tres hijos a la azotea de su complejo de departamentos. Uno por uno, sistemticamente, ella empuj a los tres nios que gritaban, fuera del techo, a la muerte. Entonces ella salt y cay a su muerte. El peridico New York Daily News mostraba escenas de espectadores angustiados geman con incredulidad al ver a la madre con sus hijos muertos en la calle. La gente se doblaba en agona al observar. Aterrados, ellos clamaban, Que ha pasado con nuestro pas?

Una nia de diecisis aos salt de un tren elevado en Brooklyn y cay sobre un pequeo nio que corra a su casa a jugar con un juguete nuevo que su madre haba comprado para l. Mientras escribo esto, el nio est en un hospital, en estado de coma. La nia adolescente muri.

Una madre perturbada puso a su pequea nia en una cama, le cubri la cabeza con un suter, fue a la cocina, tom un cuchillo y comenz a apualar a la pequea hasta matarla. Despus, la madre no poda dar una explicacin por su accin. Y ella no pareca tener ningn dolor por esto.

Otra madre completamente ebria, carg a sus dos nios en un auto y comenz a correr ferozmente cuesta abajo por la calle. Ella atropell a dos nios, que murieron instantneamente, y destroz el auto en una bifurcacin, muriendo ella y sus dos hijos. Cuatro nios muertos asesinados por una madre entontecida por la bebida!

Podra seguir sin parar, con una historia trgica tras otra. Estas son solo algunas de las historias que han aparecido en los peridicos de la ciudad de Nueva York durante los ltimos meses. No parece haber ningn lmite para los horribles crmenes cometidos contra nios. Y esto est pasando a travs de toda la tierra.

Yo creo que Dios casi no se puede contener de hacer algo del fin de los tiempos y poner fin a todo esto. Yo nunca creer que l sea solo un espritu benigno que se sienta en el cielo, impasible frente al horrible espritu de homicidio que esta suelto en esta tierra. No l es un padre compasivo que agoniza por sus hijos sufrientes.

Durante su tiempo en la tierra, Jess fue la encarnacin de la compasin de Dios. Las escrituras frecuentemente mencionan que Cristo fue movido a compasin por el sufrimiento de la gente. Y si ese fue el caso en el primer siglo, que gran pesar tendr ahora el corazn de nuestro Seor!

La Biblia nos dice nunca decayeron sus misericordias (Lamentaciones 3:22). Tu, Seor, Dios misericordioso y clemente, lento para la ira, y grande en misericordia y verdad (Salmo 86:15).

Cuando leo historias como estas de nuestros peridicos, tambin deseo ser movido a compasin. Incluso los peores pecadores son movidos cuando escuchan del sufrimiento de los nios. Yo los escucho hablar con voces temblorosas en charlas de radio que transmiten cuando conduzco en mi auto. Ellos dicen, cuan horrible, trgico, triste! Hacia donde va nuestra nacin? Debemos encerrar a todas las madres drogadictas. Necesitamos ser ms duros con el crimen. Despus de tomar algunas llamadas as, un locutor de la radio declar, Amrica todava est llena de compasin!

Pero la compasin no es solo compadecerse o lastima. Es ms que ser movido hasta las lgrimas o agitarse emocionalmente ms que hablar acerca de lo malvado de semejantes crmenes. Compasin significa piedad y misericordia acompaada de un anhelo de ayudar a cambiar las cosas. Los verdaderos sentimientos compasivos nos mueven a hacer algo!

Esto est ilustrado en la compasin que Jess mostr en los evangelios. En un momento, el se apart al desierto para orar. Cundo las multitudes descubrieron su paradero, ellos le siguieron a pie desde todos los pueblos circundantes. Desesperados, ellos le llevaron sus cojos, sus ciegos, sus moribundos, sus posedos por demonios.

Que hizo Jess? La Biblia nos dice: Y saliendo Jess, vio una gran multitud, y tuvo compasin de ellos, y san a los que de ellos estaban enfermos. (Mateo 14:14). Eso es compasin!

Si Jess hubiera sido estorbado por nuestros pensamientos modernos, l habra citado a sus discpulos a una asamblea de comit. l habra analizado los problemas y conversado a cerca de los pecados que llevaron a la sociedad a tal lugar. l habra sealado al espumoso endemoniado y dicho en tono lloroso miren lo que el pecado hace a la gente. No es trgico? Miren la paga del pecado obrando!

O bien, l podra haber dicho, como tanta gente santurrona, miren estoy muy cansado. He trabajado duro ministrndolos a ustedes. Pero ahora, estoy exhausto, y necesito conversar con mi Padre. Ustedes pueden estar seguros de que siento su afliccin. Les digo esto: yo llamar a mis discpulos, y tendremos una reunin de intercesin. Nos pondremos de acuerdo para orar por sus necesidades. Ahora, vayan en paz.

Esta es la teologa moderna, en una palabra. Todos estn dispuestos a orar pero pocos estn dispuestos a actuar!

Mateo 9 dice de Jess, Y al ver las multitudes, tuvo compasin* de ellas (*en otras versiones; fue movido a compasin); porque estaban desamparadas y dispersas como ovejas que no tienen pastor (9:36). La frase tuvo compasin aqu significa fue movido a actuar. Entonces, que hizo Jess al respecto?

l no simplemente habl. Su corazn fue movido e inspirado por lo que vio y l fue consumido por un deseo de cambiar las cosas! Tuvo compasin hacia esas personas? S. Tena lastima? S. Pero estos sentimientos lo movieron a la accin! l dijo, Yo har todo lo que pueda para hacer la diferencia!

Recorra Jess todas las ciudades y aldeas, enseando en las sinagogas de ellos, y predicando el evangelio del reino, y sanando toda enfermedad y toda dolencia en el pueblo. (verso 35). Esto no fue alguna vana teologa. Jess no solo se aparto a solas con el Padre y dijo, Seor, enva obreros a tu mies. Jess mismo fue! Impuso sus manos sobre los leprosos. El se involucro profundamente, prcticamente e ntimamente.

En Mateo 15, leemos una escena increble: Se le acerc mucha gente que traa consigo a cojos, ciegos, mudos, mancos y otros muchos enfermos; y los pusieron a los pies de Jess, y los san (15:30).

Yo no creo que podemos apreciar esta escena hoy en da. Puedes imaginrtelo? Alrededor de Jess, cientos de personas afligidas estaban sentadas en el suelo los enfermos, los desesperados, nios pequeos demasiado enfermos para sentarse, gente llorando en alta voz por ayuda, gimiendo de dolor, posedos por demonios.

Jess no los envi de vuelta. l realiz milagros de sanidad y liberacin: El mudo hablaba, el lisiado saltaba, el ciego vea, el enfermo de repente era restaurado. Y con cada sanidad, la gente presionaba para acercarse ms. Yo imagino a la gente recogiendo a sus nios enfermos y empujando hacia delante, con los discpulos tratando de guardar algn orden.

Esta gente haba salido al desierto durante tres das sin comida, y ahora desmayaban de hambre. All es cuando Jess dijo, tengo compasin de las multitudes. No los enviar de vuelta en ayunas, para que no desmayen en el camino.

Podra detenerme aqu y hacer esto el enfoque de este mensaje: Tengo compasin y no los enviar de vuelta! Pero el Seor quiere decirnos mucho ms:

La compasin de Amrica est muriendo! Aqu en el puerto de Nueva York reside una dama cuyos brazos han estado extendidos hacia los pobres y necesitados por ms de cien aos. An as, ahora esto est cambiando drsticamente.

Los gobernadores estatales compiten entre s por ver quin podr cortar ms gente de las listas de asistencia pblica. Desde la casa blanca hacia abajo, en ciudades y condados, hay una carrera por sacar gente de los programas de alimentacin y barrer con la asistencia publica para dar lo menos posible. Justo el mes pasado, el presidente Clinton habl a cerca de muchas miles de personas que ya no reciben los beneficios de bienestar. Y aqu en la ciudad de Nueva York, los centros de distribucin de alimentos se estn desocupando rpidamente. Los fondos para programas de ayuda estn menguando.

Ahora, yo no soy un poltico. No quiero entrar en una discusin poltica acerca de lo bueno y lo malo de la asistencia pblica a los pobres. Si, yo s que ha habido mucho fraude en el sistema. Y creo que debe haber cambios que todos los hombres que sean fsicamente capaces deben trabajar, y que nosotros no debemos pagar a las madres por agregar ms bebs ilegtimos a sus asignaciones de bienestar.

Pero lo que me molesta es que la mayor parte de la argumentacin que escucho a cerca de este tema es con espritu de maldad, fra, y sin corazn. Hay una dureza barriendo este pas!

Yo te digo, Dios no estar quieto permitiendo que la nacin ms rica de la tierra ponga a madres y nios en las calles. l no permitir que billones se gasten en la investigacin espacial mientras en nuestras ciudades, hay nios hambrientos. Y adems aseguro estamos a solo dos aos de tener centenares de familias en las calles de Nueva York!

Yo s el sentir de muchos trabajadores de clase media a travs de la nacin mientras se esfuerzan por sobrevivir financieramente. Mucha gente suburbana tiene buenos trabajos pero estn pagando impuestos hasta la muerte. Ellos no pueden darse el lujo de tener a sus hijos vacunados o darles atencin medica ellos escuchan de cmo las madres de los barrios pobres consiguen atencin mdica gratuita. Ellos apenas pueden mantener comida en sus mesas, mientras que se entrega comida gratis a la gente de los programas de bienestar. Una madre que trabaja duro dijo, Seria mejor que fuera al programa de bienestar tambin. Al menos mis hijos tendran atencin medica.

Yo entiendo todas estas presiones econmicas. Pero como cristianos, nuestro desafo es no permitirnos aquella frialdad que nuestro pas tiene, que ese espritu duro hacia los pobres no nos robe la compasin!

Un gobernador anterior est presionando por una nueva ley que legalizara la eutanasia, el asesinato de los ancianos enfermos. l dice que la nacin no puede continuar desperdiciando sus recursos en ellos. l sugiere que lo mejor que el anciano enfermo puede hacer es morir y ahorrar nuestros recursos mdicos para los jvenes.

Esto es chocante! Nos hemos endurecido e insensibilizado tanto que Jack Kevorkian Doctor Muerte, el hombre que asisti en suicidios planificados parece como un hroe. l es llamado un doctor compasivo, cuidadoso; ayudando a las personas a salir de su miseria. An as, lo que l hace es claramente asesinato!

An peor, la eutanasia est siendo permitida ahora no solo en casos de dolor fsico, sino tambin con dolor emocional. Si tienes una depresin nerviosa y no quieres enfrentar la vida, puedes llamar al Doctor Muerte!

Un da cercano, nuestra nacin legalizar la eutanasia. Eliminaremos ms y ms estampillas de alimento para los pobres. Y nuestras calles comenzarn a parecerse a las de pases del Tercer Mundo llenas de mendigos, nios y desamparados.

Lo que me impresiona ms an es la falta de compasin que veo extendindose en la Iglesia de Jesucristo. En mucha gente de Dios est creciendo la frialdad y la falta de misericordia. Denominaciones dicen que sus fondos para misiones estn disminuyendo. La gente simplemente ya no est dando para misiones en el extranjero.

Recientemente, envi a nuestros lectores un simple reporte de las ofrendas de misiones. Escrib, Deseo que sepan que al menos el diez por ciento de cada dlar que nos envan se diezma a las misiones. Estamos apoyando ministerios de ayuda a los nios en todo el mundo. Dirigimos orfanatos en Romania y Mozambique, y damos muchos miles a los nios pobres de Latinoamrica.

Pens que la gente estara agradecida del compromiso de ofrendar de nuestro ministerio. Pero me sorprend y espant por el nmero de cartas de personas airadas que recibimos de varios lectores. Aqu est lo que algunos de ellos dijeron:

Qutenme de su lista de correos. Yo no les di permiso para que gastaran mis ofrendas para tu ministerio en el extranjero. Quiero que cada dlar quede en los Estados Unidos.

Yo no quiero que mi dinero se vaya a misiones en el extranjero. Apoyar tu ministerio en Nueva York, pero en ninguna otra parte.

Yo digo a todos quienes sienten como estas personas: si no te gusta el hecho de que diezmemos tus ofrendas, lo mejor que puedes hacer es dejar de drnoslas. No me importa si esto nos cuesta miles de dlares. Dios no soportar esa clase de actitud!

Gracias a Dios, la mayora de los lectores estn agradecidos por nuestro compromiso de repartir con compasin.

Nosotros ministramos en una de las ciudades ms problemticas y heridas en Amrica tanto espiritualmente y, muy pronto, econmicamente. Es una ciudad donde ms de dos millones de personas reciben ayuda del gobierno, muchas de ellas en asistencia pblica. Esta ciudad est inundada con adiccin a las drogas, desesperacin, y desamparados.

Mateo escribe que multitudes venan a Jess, trayendo a sus pies los cojos, ciegos, mudos, mancos y lisiados. Y hoy da veo que esto esta aconteciendo en Nueva York con la Iglesia de Jesucristo. El gobierno ha fallado; todas las dems instituciones y sistemas han fallado; entonces, cual es la ultima esperanza para la humanidad? Se supone que es la Iglesia de Jesucristo! Y muy pronto, tendremos ms personas heridas, ms desamparados, ms desvalidos puestos a nuestros pies. Ellos sern trados a nuestra misma puerta!

Qu haremos nosotros entonces? Oraremos por un avivamiento, tendremos vigilias y luego simplemente pasarle por encima a los desamparados que estn en las puertas de nuestras iglesias? No nunca! Eso no es compasin!

Varios domingos atrs, yo no pude dormir. Mi espritu estaba agitado, porque no poda sacar de mi mente a una madre que conoc despus del servicio. En un brazo ella sostena a su hijo de cinco das de nacido, y con su otra mano toma a su hijo de dos aos. Su esposo perdi su trabajo y no poda encontrar otro empleo, y la abandon.

Esta joven madre ahora estaba durmiendo en el piso de un pequeo apartamento donde viven otras diez personas. Ellos quisieron sacarla porque sus nios lloraban mucho. Ella no pudo conseguir entrar al programa de bienestar; ella no tena familia, ni un lugar donde ir, ni dinero para leche. Ella me dijo, Voy a las calles. No hay ningn lugar donde podamos ir!

Yo di algn dinero a esta joven y lastimada mujer, y nuestro ministerio de ayuda comenz a trabajar con ella. Pero eso no fue el final. Otra joven madre que asiste a nuestra iglesia vino a nosotros con una situacin similar. Su esposo estaba en drogas y no poda mantener su trabajo. Ella no tena preparacin y no poda trabajar. Ella tambin me dijo, Pastor David, estoy a una o dos semanas para terminar en las calles.

Despus conoc a otras dos estimadas mujeres cuyos maridos las golpeaban. Ellas teman por sus vidas y por la seguridad de sus hijos. Y todos los hogares seguros (Nota de traduccin: hogares para las mujeres maltratadas) de la ciudad estn llenos, con largas listas de espera.

Cuando me acost esa noche para intentar dormir, no pude cerrar mis ojos. Fui movido yo? S. Lleno de lastima? S. Pero algo ms estaba ocurriendo dentro de m. Yo or: Seor, qu quieres que hagamos sobre esto? Cmo podemos cambiar esta trgica situacin? Tengo sesenta y cinco aos, y estoy cansado. He pasado bastante tiempo con drogadictos y alcohlicos. Por favor otro programa, no.

Pero la imagen del nio de cinco das segua viniendo a mi mente. Yo pens, Nosotros somos la Iglesia de Jesucristo. Nosotros debemos tener compasin, y no los echaremos fuera. Qu podemos hacer?

Me di cuenta que dentro de dos o tres semanas, nuestro Hogar Isaas estara abierto y operando en Time Square. Y estaramos mudando nuestro Hogar Timoteo de hombres a esas instalaciones.

De pronto, eso era, justo frente a mis ojos: El edificio del Hogar Timoteo dejara libres diez apartamentos. Nosotros podramos usar ese edificio como un centro de vivienda para madres abusadas y abandonadas. Podramos poner a solo dos madres con sus hijos en un apartamento y eso significa ayudar a cuarenta o cincuenta familias al ao. Esto es solo una gota en un cubo, pero algo debe hacerse!

La compasin no puede ser solo lastima y piedad. Debe ser sentimientos que mueven a la accin! Pregunta, Dios, qu quieres que yo haga?

Nuestra iglesia ha pasado mucho tiempo en oracin. Nosotros hemos concluido una cadena de oracin de veinticuatro horas al da, por treinta das. Y en enero, comenzamos el ao en oracin y ayuno. Pero exactamente, sobre que estamos orando? Que es lo que estamos buscando?

El difunto Leonard Ravenhill, quien escribi Por qu el avivamiento tarda?, fue un gran hombre de Dios a mi parecer, un verdadero profeta. Yo me sentaba por horas escuchndolo decir que vena un gran avivamiento. l lo esper por ms de sesenta aos, pero muri sin poder verlo.

Cuando yo crec en la iglesia Pentecostal, todo lo que mi padre y mis abuelos siempre hablaban era acerca del gran avivamiento que vendra. Evangelistas hablaban de ello en las reuniones: Un avivamiento est en camino. Dios alcanzar a multitudes para el reino!

Sin embargo, en el corazn de toda esta pltica haba un pensamiento bsico: No tendremos que salir a las calles y ensuciarnos las manos. Podemos simplemente quedarnos aqu y orar. El Espritu Santo atraer a la gente!

Pero la definicin de avivamiento es, el despertar o resurreccin de lo que est a punto de convertirse en cadver. Significa, despertar a una iglesia muerta reanimarla, resucitarla, para que el impo se incline a entrar por sus puertas.

Amado, la iglesia no debe necesitar ser resucitada de la muerte! No debemos estar orando por algn gran avivamiento. Y mientras todos nosotros hemos estado encerrados, orando por avivamiento, las siguientes cosas estarn pasando en nuestro pas:

La mitad de todos nuestros adolescentes fuma marihuana. Ms de un tercio bebe. Nios de doce aos se entregan al sexo. Nias de catorce aos estn teniendo bebs. Hemos perdido una generacin entera de gente joven al cinismo, dureza, y desilusin.

Nuestras ciudades estn a punto de arder en llamas. La nacin est saciada con sexo, placeres, la idolatra de los deportes. Uno de cada dos matrimonios termina en divorcio.

El sonido sollozante del hambriento, nios golpeados ahora se levantan como truenos en nuestras ciudades. Homosexuales exigen derechos matrimoniales. Padres desesperados vagan por las calles por centenares, buscando trabajo. Muchos hombres negros e hispanos no pueden ni siquiera conseguir una entrevista de trabajo.

Mientras se acerca el ao 2000, qu est haciendo la iglesia acerca de estas cosas? Que ha capturado nuestra atencin y energas?

No mucho tiempo atrs recib una carta de una mujer que asiste a nuestra iglesia. Ella deca, en efecto, La Iglesia de Times Square necesita lneas de sanidades, reuniones de milagros, seales y maravillas como las cosas que suceden en el programa de televisin del Hermano Fulano de Tal.

Yo quiero responder a la carta de esta hermana, amorosa y pblicamente: Amada Hermana: permteme decirte como tu puedes producir un poderoso milagro, una gran seal para todos los incrdulos.

Hay una madre en nuestra iglesia que est a punto de ser puesta en la calle con sus hijos. Ella es soltera y deseosa de trabajar. Serias tan amable y la alojaras dndole tu habitacin extra por tres meses? O permitiras simplemente que duerma en tu sof? Le daras alimento mientras ella busca un apartamento? Le ministraras? La levantaras del hoyo de la desesperacin?

Constituira esto un milagro? Sera considerada una seal, una maravilla? S absolutamente! Cada incrdulo que lo vea dir, Ahora s, de esto se trata Cristo. Y eso debe ser la cristiandad!

La Biblia dice que si nosotros estamos cubriendo las necesidades de la humanidad si estamos obedeciendo el mandamiento de ser compasivos con el mundo, y dndonos a las necesidades de otros entonces seremos un huerto de riego! Si tu das tu pan al hambrientosi cubres al desnudosi no escondes tu rostro del pobresi no apartas tu alma del hambriento, y sacias el alma que sufreentonces el Seor te pastorear siempre, saciar tu alma (ver Isaas 58:5-12). Sers como huerto de riego, y como manantial de aguas, cuyas aguas nunca faltan (verso 11).

Un conocido ministro recientemente me mostr una cinta de vdeo de una reunin de iglesia que es parte de lo que est siendo llamado un gran avivamiento. Aun as lo que vi en ese vdeo eran manifestaciones extraas. En un momento, el pastor que diriga la reunin dijo a un hombre que lloraba, No llores aqu. Esta no es una reunin de oracin. Es tiempo de rer! Luego el lder se arrodill junto a un hombre en el piso y comenz a decir, Bombea, viejo gozo! Bombea, viejo gozo!

Yo le ped a mi amigo ministro que me explicara todo esto. En esencia, l dijo, Los cristianos estn tan derrotados, secos y abatidos que Dios est tratando de resucitar el gozo. El Espritu Santo est tratando de liberar al pueblo a travs de manifestaciones.

No! La risa que vemos hoy no es nada nuevo. Yo tena una risa santa cuando tena diez aos. Me rea por horas y despus lloraba por horas todo por la conviccin del Espritu Santo. No hay nada nuevo en esto.

Yo te pregunto: Cmo pudo la iglesia alguna vez llegar a esta bajeza de llegar a estar abatida, de alguna manera? Cmo pudo la iglesia alguna vez venir a necesitar semejante bombeo?

Es porque no hemos considerado Isaas 58! Ese pasaje nos dice muy simple y directamente por qu los cristianos pierden su gozo, se van secando y atando. Es porque ellos se han absorbido en su propia supervivencia!

Muchos cristianos ahora escuchan solo sermones acerca de cmo cubrir los problemas de la vida, como tratar con el vaco. Ellos ya no tienen una carga por las misiones, por la gente en las calles, por el pobre. En cambio, ellos se sientan juntos y se quejan de cmo sus impuestos estn siendo gastados. Y estos mismos cristianos le pasan por al lado al pobre y necesitado!

Por qu los pastores no estn enseando a su gente a extender la mano a las necesidades humanas, para que cuando el necesitado venga a la iglesia, encuentre en ella un huerto de riego, un profundo manantial que fluye? El Seor dijo que l proveera para cualquiera que est deseoso de dar de s mismo!

Cerca de trescientos aos atrs, los Moravianos vinieron a Nueva York con los holandeses. Mientras ellos establecan una iglesia, tambin organizaban un centro de ayuda para los pobres. Hoy, todas sus iglesias se han ido pero el ministerio Moraviano an existe en Nueva York, como uno de los grandes programas de alimentacin en la ciudad.

Del mismo modo, la Misin Bowery todava permanece despus de ciento cincuenta aos. Y el ministerio de Jerry McCauley para los pobres an est operando despus de ciento sesenta aos. Dios est satisfaciendo las necesidades de los pobres aunque muchas iglesias se han hecho polvo!

No tenemos que viajar a algn lugar ms lejano que nuestro propio barrio para tener el ms grande avivamiento imaginable. Dios dice que si nosotros damos nuestro pan al hambriento, si hospedamos al pobre en nuestra casa, si cubrimos al desnudo y nos damos en alma al hambriento y sufriente, l nos guiar y proveer continuamente. Seremos como un huerto de riego, un manantial de agua cuyas aguas nunca faltan!

Dios est dicindonos, Enfcate en ayudar a otros! Extiende tu mano al pobre, al lastimado. Yo te responder, te guiar, te satisfar. T vendrs a ser un manantial de vida para otros. Tus bendiciones nunca faltarn!

Si t no ests conforme con esta enseanza del Antiguo Testamento, escucha lo que Jess dice en el Nuevo Testamento:

Estuve hambriento, y no me disteis de comer: tuve sed, y no me disteis de beber; fui forastero y no me recogisteis; enfermo, y en prisin, y no me visitasteis.

Entonces tambin ellos le respondern diciendo: Seor, cundo te vimos hambriento, sediento, forastero, desnudo, enfermo, o en la crcel, y no te servimos?

Entonces les responder diciendo: De cierto os digo que en cuanto no lo hicisteis a uno de estos ms pequeos, tampoco a m lo hicisteis. E irn stos al castigo eterno, y los justos a la vida eterna. (Mateo 25:42-46).

Pero el que tiene bienes en este mundo y ve a su hermano tener necesidad, y cierra contra l su corazn, cmo mora el amor de Dios en l? (1 Juan 3:17).

A estas alturas puedes estar diciendo, me gustara ser compasivo, para ayudar al necesitado. Cmo puedo yo hacer el cambio?

Yo solo puedo decirte que Dios responder esta oracin: Seor, yo veo todas las necesidades humanas alrededor de m. Y s que el nico Jess que mi ciudad podr ver en la vida es el que vern a travs de m y de mi iglesia. Dios, tendrs que dirigirme. Yo estoy listo con mi billetera, mi casa, mi tiempo. Mustrame donde ir, Seor! Puedes estar seguro Dios traer esas necesidades a tus puertas!

Puedes pensar, Pero yo tengo muchos problemas propios. No puedo pasar mi tiempo ayudando a otros. Djame preguntarte: estas t solo? Ofrcete como voluntario para visitar a los adoloridos en un hospital o en un hogar de ancianos. Antes que esa noche termine ya no estars solo! Necesitas un amigo? Ve a la calle, encuentra una persona desamparada y pregntale, tienes hambre? Vamos a McDonalds. Cmprale una hamburguesa a aquella persona lastimada y hblale de Jess.

Dios desea que cada uno de nosotros seamos parte de su corazn compasivo al mundo. Y si t estas dispuesto a hacer eso, l enviar las necesidades a tu puerta.

As que, presntate al Seor para ser usado. l abrir todas las puertas para ti. Entonces conocers verdaderamente su corazn de compasin!