Cámbiame, Oh, Señor

ltimamente me he sentido muy desalentado por lo que nosotros los cristianos llamamos consejera. Ahora mismo hay ms consejeros cristianos adiestrados que en toda la historia de la iglesia. Y hay disponible gran cantidad de libros de ayuda personal y manuales sobre cmo manejar relaciones, ofreciendo consejo espiritual sobre todos los temas, desde matrimonio, acondicionamiento fsico, hasta la crianza de los nios.

Sin embargo, trgicamente, ahora tenemos ms individuos, matrimonios y familias perturbados en la iglesia que nunca antes. La confusin en los hogares cristianos hoy en da es indecible, y, amado, esto no debiera ser as.

Djame decirte honestamente que no estoy en contra de la consejera cristiana. Muchas personas estn respondiendo a la consejera que estn recibiendo, y sus vidas, sus matrimonios y sus hogares estn siendo sanados. De hecho, la consejera ha sido un ministerio importante en la iglesia de Jesucristo. Casi todas las congregaciones grandes en Amrica tienen al menos un consejero a tiempo completo en su cuerpo administrativo. Aqu en Times Square Church, usamos unos cuntos consejeros.

Pero veo ms y ms cristianos perturbados que no responden a la consejera que reciben. Pueden ser ministrados por semanas, y an meses, sin mostrar ningn resultado. Un pastor o consejero puede llevarlos paso a paso por las Escrituras, mostrndoles la clara verdad de la palabra de Dios. Les puede decir: Esto es lo que Dios dice sobre su problema. l dice que se supone que usted haga esto" Les confronta con la realidad de que recibirn el juicio de Dios si no abandonan su pecado.

Sin embargo, este consejo no se recibe. Por qu? Hay un velo espiritual sobre los ojos de esta gente. Tienen una terrible ceguera que no les permite ver su propia culpa y la necesidad de cambiar.

En muchas familias cristianas las personas se estn atacando unos a otros, peleando amargamente. En algunos casos se estn demandando unos a otros, llevando sus familiares a la corte. Las madres se enajenan de sus hijas, los padres no le hablan a sus hijos. Ellos claman que aman a Jess, sin embargo, persisten en su ira, en su amargura. Es todo un caos.

Desde que comenc a pastorear me he encontrado en medio de muchas contiendas familiares. Y puedo testificar que pocas de esas guerras se pueden resolver sin la intervencin sobrenatural. Por qu? Todos quieren que la otra persona cambie.

Una de las partes envueltas me dice: Por qu l es tan terco? Es terrible. l necesita cambiar. Entonces escucho algo similar de la otra parte: Cmo es que puede tener un corazn tan duro? Ella sabe que estoy haciendo lo mejor que puedo. Es esto lo que recibo por ser bueno con ella?

Siempre es culpa de la otra persona, es la otra persona la que necesita ayuda. Por esto pienso que la consejera no tendr algn impacto hasta que el pueblo de Dios tome una decisin. Todos tenemos que apropiarnos de esta oracin cada da, de una manera sincera: Oh Seor, cmbiame a m.

Pasamos mucho tiempo orando: Seor, cambia mis circunstancias cambia a mis compaeros de trabajo cambia la situacin de mi familia cambia las condiciones de mi vida Sin embargo, en pocas ocasiones hacemos esta oracin que es la ms importante: Cmbiame, oh Seor. El problema real no es mi esposa, mi hermano, mi amigo. Yo soy quien necesita la oracin."

Dios orquestra los pasos y las vidas de todos sus hijos. l no permite que nos ocurra algo simplemente por que s o por casualidad. Y eso significa que l ha permitido tu crisis. Qu te est tratando de decir Dios a travs de esa situacin? l te est diciendo que necesitas cambiar.

Nos guste o no, todos estamos en el proceso de cambiar, de una manera u otra. En la dimensin espiritual, no existe tal cosa como simplemente existir sino que estamos continuamente siendo cambiados para bien o para mal. Estamos siendo ms como nuestro Seor, o ms como el mundo; o crecemos ms en Cristo o nos apartamos de l.

As que, ests cambiando para tener un espritu ms dulce como Jess? Te miras seriamente al espejo cada da y oras Seor, quiero ser ms conforme a tu imagen en cada rea de mi vida?.

O, has permitido que la amargura se haya arraigado, convirtindose en rebelin y en dureza de corazn? Has aprendido a escudarte de la conviccin que producen la palabra de Dios y la voz de su Espritu? Estn saliendo por tu boca cosas que alguna vez pensaste que un cristiano era incapaz de pronunciar? Te ests endureciendo ms all de la posibilidad de cambiar?

Si esto est describiendo como t te sientes, djame hablarte llanamente: Nunca recibirs liberacin hasta que cambies. Tu vida ser ms catica y tu situacin empeorar. Deja de defender tu causa, sealando a otros, justificndote. Dios no te alcanzar hasta que despiertes y admitas: Nada cambiar para m a menos que yo cambie.

Clama honestamente al Seor en oracin: Cmbiame, oh Seor. Escudrame, oh Dios; mustrame dnde he fallado y me he descarriado. Expn mi orgullo, mi ira, mi terquedad y mi pecado. Aydame a rendirlo todo.

Cuntos ms expertos, consejeros, noches de soledad y luchas infructuosas tendrs que soportar antes de que despiertes a la verdad? Para que ocurra alguna sanidad o restauracin, tienes que tomar responsabilidad. Tu milagro depende de que t cambies.

La palabra de Dios muestra claramente dos pasos que tienes que tomar si deseas cambiar. Presta atencin a esta palabra y experimentars un cambio que perdurar:

Pablo describe un cambio que tiene que ocurrir antes que sea posible que ocurra cualquier otro cambio:

As que, teniendo tal esperanza, usamos de mucha franqueza; y no como Moiss, que pona un velo sobre su rostro, para que los hijos de Israel no fijaran la vista en el fin de aquello que haba de ser abolido. Pero el entendimiento de ellos se embot; porque hasta el da de hoy, cuando leen en el antiguo pacto, les queda el mismo velo no descubierto, el cual por Cristo es quitado. Y aun hasta el da de hoy, cuando se lee a Moiss, el velo est puesto sobre el corazn de ellos.

Pero cuando se conviertan al Seor, el velo se quitar. Porque el Seor es el Espritu; y donde est el Espritu del Seor, all hay libertad. (2 Corintios 3:12-18).

En este pasaje, Pablo est hablando principalmente sobre la ceguera de los judos con relacin a Jess como el Mesas. A la vez, el tambin est estableciendo un principio que aplica a todas las personas, sean judas o gentiles. l est hablando el no poder ver a la verdad bblica. Fjate en el versculo 14: Pero el entendimiento de ellos se embot; porque hasta el da de hoy, cuando leen en el antiguo pacto, les queda el mismo velo no descubierto, el cual por Cristo es quitado.

Por favor, entiende esto. La gente a la que Pablo escribi era sincera. Estudiaron fielmente los libros de Moiss, la ley y los profetas, los salmos de David. Reverenciaron la palabra de Dios, enseando de ella y citndola libremente. Pero todava tenan un velo sobre sus ojos.

Pensamos que hay un velo espiritual cubriendo los ojos de los judos, los musulmanes y otros, que no les permite ver la verdad sobre Jess. Sin embargo, tambin hay un velo cubriendo los ojos de muchos creyentes. Ellos leen las claras advertencias de Dios en las Escrituras, las escuchan cuando las predican con poder, sin embargo, no son afectados por ella. De hecho, ellos continan haciendo las mismas cosas que denuncia la palabra de Dios. Considera estos ejemplos:

Jess mismo dice: Porque si perdonis a los hombres sus ofensas, os perdonar tambin a vosotros vuestro Padre celestial; mas si no perdonis a los hombres sus ofensas, tampoco vuestro Padre os perdonar vuestras ofensas. " (Mateo 6:14-15).

Cunto ms claro puede ser Dios sobre este asunto del perdn? Sin embargo, muchos cristianos todava tienen amargura, deseos de venganza. Dicen: Oh, he perdonado a esa persona, pero no estn hablando de corazn. Y el Seor lo conoce.

Es posible que tal cristiano haya sido maltratado o despreciado por alguien su jefe, su esposa, un compaero de trabajo, un amigo. Ahora el piensa que se justifica tener ira o no perdonar. Sin embargo, la palabra nos dice que si l permite aunque sea una onza de falta de perdn en su corazn, sus pecados se comenzarn a acumular en contra de l.

Piensa en el terrible peligro en que se encuentra este cristiano. Da tras da sus pecados se amontonan. Sus oraciones no son odas. l est totalmente por su cuenta, siempre en peligro, su alma expuesta a los poderes satánicos. Y cuando l se presente ante Dios para ser juzgado, cada uno de sus pecados se levantar y lo acusar. Ni una de sus transgresiones habr sido perdonada porque l no pudo perdonar a otros.

l oir al Seor decir: Te advert, te llam, te habl tan llanamente como pude pero no quisiste escuchar. Ms bien, persististe en no perdonar. Y ahora, yo no te perdonar. Este ser el resultado final de la ceguera espiritual.

Porque Jehov Dios de Israel ha dicho que el aborrece el repudio [divorcio]... (Malaquas 2:16). La palabra establece muy claramente que Dios aborrece el divorcio. Sin embargo, muchos cristianos hoy le dicen a sus pastores o amigos: He orado con respecto a divorciarme de mi esposa y el Seor me ha dado su aprobacin.

No. Dios responde a esta mentira directamente en el prximo versculo: Habis hecho cansar a Jehov con vuestras palabras. Y decs: En qu le hemos cansado? En que decs: Cualquiera que hace mal agrada a Jehov, y en los tales se complace; o si no, dnde est el Dios de justicia? (Versculo 17).

En otras palabras, el Seor est diciendo: Vas a la iglesia, me alabas y presentas una sonrisa cristiana. Sin embargo, traicionas a tu esposa y tratas mi palabra con engao. Te he dicho que aborrezco el divorcio, sin embargo, lo llevas a cabo. Incluso lo llegas a considerar como algo bueno, diciendo que yo lo apruebo. Pero ests ciego. Rehsas creer que te voy a juzgar por tu desobediencia.

Hoy en da la tasa de divorcios en los cristianos es tan alta como la de los no creyentes. Dime es que la palabra de Dios es un chiste? Se pueden poner sus advertencias a un lado como si fueran tan slo sugerencias en vez de mandatos? No, nunca. Un velo cubre los ojos de la iglesia. Y Dios nos est advirtiendo: Toda la consejera del mundo no te servirn de nada si t no obedeces mis mandamientos. Mi palabra tiene que convertirse en la regla de tu vida.

(Esto no es para censurar a aquellos que estn divorciados. El divorcio es inevitable en algunas situaciones como por ejemplo, en casos de abuso fsico, adulterio o cuando un esposo o esposa incrdula abandona el hogar.)

Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan o persiguen. (Mateo 5:44) La blanda respuesta quita la ira (Proverbios15:1) Airaos, pero no pequis; no se ponga el sol sobre vuestro enojo. (Efesios 4:26)

Mil consejeros te pondrn decir que tienes derecho a airarte, a sentir resentimiento, a no perdonar. Pero al fin y al cabo, sus palabras no cuentan. La palabra de Dios es la palabra final. Y si no le temes si no ests preparado para obedecer sus mandamientos en todo no tienes esperanza de liberacin.

La Biblia habla clara y fuertemente a todos los que obedeceran al Seor. No puedes cambiar si persistes en mantenerte ciego a la palabra de Dios.

Pablo dice que para que se nos quite la ceguera tenemos que convertirnos al Seor. Pero cuando se conviertan al Seor, el velo se quitar. (2 Corintios 3:16). La palabra griega que se utiliza para convertir significa el invertir el rumbo. En resumen, Pablo est diciendo Tienes que admitir que el rumbo que ests tomando te ha llevado a estar vaco, a la ruina y a la desesperacin.

Si ests en confusin si hay algo mal en tu vida y las cosas se estn deteriorando ahora sabes que tendrs que cambiar el rumbo. Puedes pensar: Es mi esposo el que est mal. Estoy esperando que l cambie. O Mi esposa va a la ruina a menos que cambie. O Mi jefe est mal. Algo tiene que cambiar en l.

Nosotros vemos claramente los errores y las malas acciones de otros. Sin embargo, no vemos nuestra propia necesidad de cambiar. Tenemos que hacer una pausa para enfrentar la realidad para admitirle al Seor: Seor, yo soy quien necesita cambiar. Por favor, Padre, mustrame en qu me he desviado.

Cmo puedes cambiar tu rumbo? Cmo puedes convertirte al Seor y quitarte el velo de tus ojos? Aqu est la receta que Pablo nos da para el cambio:

1. El cambio es una obra exclusiva del Espritu Santo. Cmo no ser ms bien con gloria el ministerio del espritu? (2 Corintios 3:8) Nosotros simplemente no podemos cambiarnos a nosotros mismos. Solamente el Espritu de Dios nos puede conformar a la gloriosa imagen de Cristo. Todos los hemos odo decir: Cuando una persona se convierte al Seor, Dios quita el velo de sus ojos. Esto es solamente obra del Espritu.

Tambin leemos: Porque el Seor es el Espritu; y donde est el Espritu del Seor, all hay libertad. (versculo 17). La palabra libertad aqu significa que ya no se es un esclavo, exento de deudas, libre, desencadenado. Esto describe la libertad que recibimos cuando se abren nuestros ojos. De repente, podemos ver las cosas en una nueva luz. Solamente el Espritu Santo puede romper la manera en que hemos visto las cosas por toda una vida, solamente l puede convertirnos y encaminarnos en el rumbo correcto.

En resumen, esta conversin que Pablo habla aqu significa confiar completamente en el Espritu de Dios. Tambin significa el alejarnos de toda consejera que no sea basada en la Biblia, de todas tus propias ideas y planes, y clamar solamente al Espritu Santo para que te dirija y te gue.

Pablo experiment este tipo de conversin. En Hechos 9, cuando todava se conoca como Saulo, l estaba en un rumbo incorrecto. Hablando de tener un velo cubriendo sus ojos l estaba yendo a Damasco para all perseguir a los cristianos. Saulo realmente pensaba que le estaba haciendo un favor a Dios arrestando a los creyentes y envindolos a la crcel.

Pero el Seor intercept a este hombre y cre una crisis en su vida. Cuando Jess se encontr con Saulo en el camino a Damasco, le golpe con una luz tan poderosa que literalmente le dej ciego. Saulo, ciego, tuvo que ser guiado hasta una casa en Damasco, donde permaneci hasta que el siervo de Dios, Ananas, lleg. Ananas le dijo:

... Hermano Saulo, el Seor Jess, que se te apareci en el camino por donde venas, me ha enviado para que recibas la vista y seas lleno del Espritu Santo... (Hechos 9:17)

Saulo rindi su pasado, su presente, todo al Espritu Santo e inmediatamente se le quit el velo de sus ojos.

2. El cambio tambin requiere lo que Pablo llama una cara descubierta. El escribe: Por tanto, nosotros todos, mirando a cara descubierta como en un espejo la gloria del Seor... (2 Corintios 3:18). La raz de la palabra cara descubierta aqu tiene un significado impresionante. Significa que estoy totalmente comprometido a permitirle a Dios que exponga toda cosa oculta de tu corazn con el fin de ser liberado definitivamente de ella.

Esta cara descubierta clama: Escudrame, Seor, mira si en m hay camino de perversidad. Mustrame si estoy viviendo contrario a tu palabra. Quiero ser libertado de todo lo que no es tuyo. Quita mi orgullo, mis ambiciones, mi intelecto egosta, mi razonamiento. S que no puedo encontrar la salida a mi situacin. Espritu Santo, necesito tu poder y tu sabidura. Dejo ante ti toda esperanza que tengo de poder resolver las cosas a mi manera.

Para muchos creyentes, esto es muy difcil de hacer. Durante toda su vida como creyentes, han sobrevivido por sus propios ingenios, por su propia sabidura. Y ahora se les hace muy difcil admitir que han echado las cosas a perder y que necesitan rendir el control de sus vidas.

Hace unos aos atrs el Seor tuvo que quitar mi orgullo en esta rea. Ahora, gracias al Seor, admito libremente cuando he echado las cosas a perder. Mi oracin constante es: Dios, cometo tantas torpezas. Cometo errores tan terribles, me meto en tantos los. Por favor, Seor arrglalos t. Yo no puedo arreglarlo. Slo t puedes. Gracias a Dios, l se deleita en arreglar nuestros los cuando nosotros procuramos hacer su voluntad.

El cristal que Pablo menciona en este pasaje es un espejo. Y, amado, nuestro espejo es la palabra de Dios. Ella es la nica que nos refleja con exactitud nuestra condicin. Pablo nos dice: Ve al espejo de la verdad de Dios, y contempla tu vida. Dile al Seor que ests en el rumbo incorrecto y que deseas cambiar. Pdele a su Espritu que te humille y que te abra su palabra. No prestes atencin a los consejos de otros, a tus propias ideas, a tus propias maquinaciones. Ms bien, vulvete al Espritu Santo en completa confianza. Cree lo que l te dice.

Si confas en el Espritu Santo solamente, alejndote de todas las otras ayudas, l quitar el velo de tus ojos. El tambin enviar a tu vida personas dirigidas por el Espritu Santo y t comenzars a cambiar en ese mismo momento.

3. Pablo concluye que poco a poco somos transformado a la semejanza de Cristo. Este proceso simplemente no ocurre de un da para otro. Ocurre lentamente... paso a paso... segn le buscamos y obedecemos su palabra: Somos transformados de gloria en gloria en la misma imagen, como por el Espritu del Seor. (2 Corintios 3:18).

Puede ser que t no lo sienta, pero ests cambiando cada vez que abres las Escrituras y lees la palabra de Dios con un corazn abierto, cada vez que te arrodillas y sacas tiempo de calidad para estar con el Seor, cada vez que clamas al Seor para que te gue y te ensee. A lo mejor piensas que no ests progresando nada pero s ests progresando.

El Espritu procura traer estos tres cambios maravillosos a nuestras vidas:

1. El primer cambio es un aumento en el conocimiento de que Dios va a ser misericordioso con nosotros a lo largo de toda nuestra prueba. Por lo cual, teniendo nosotros este ministerio segn la misericordia que hemos recibido, no desmayamos. (2 Corintios 4:1).

Este es el ministerio misericordioso que hemos recibido del Espritu Santo: l abre nuestros ojos a las tiernas misericordias de Cristo para nosotros. l implanta en nosotros un conocimiento interno de que el Seor est de nuestro lado, que l es por nosotros. Y l nos muestra cun comprometido est el Seor para librarnos de caer cunto l se compadece por lo que estamos pasando, cunto nuestros sentimientos y nuestras flaquezas le afectan a l.

Puede ser que ahora mismo ests sintiendo que has sido abusado o que nadie te ama. El diablo te podra estar haciendo creer que Dios te ha abandonado a tu propia suerte que mereces sufrir, que todo ha terminado para ti, que no hay esperanza. Amado, esas son mentiras del infierno. Ms que todo, Dios desea quitar de ti el concepto pervertido que tienes de l. El te ama tiernamente y ha establecido un tiempo para otorgar todas sus misericordias sobre ti.

David llor miserablemente al sentirse abrumado por su situacin: Mi corazn est herido, y seco como la hierba, por lo cual olvido de comer mi pan... Velo, y soy como el pjaro solitario sobre el tejado. Cada da me afrentan mis enemigos... Y mi bebida mezclo con lgrimas... Mis das son como sombra que se va... (Salmo 102:4, 7-9, 11). l gimi: Estoy en una condicin terrible fsica, mental y emocionalmente.

Y fue en ese mismo momento que Dios determin liberar a David. Y el Seor se movi rpidamente en misericordia, le ayud y le confort. David testific: Te levantars y tendrs misericordia de Sin, porque es el tiempo de tener misericordia de ella, porque el plazo ha llegado. (Salmo 102:13).

Dios estableci un momento para librar a David en su hora ms difcil cuando l pensaba: He sido reducido a nada. De la misma manera, hoy, Dios ha establecido una hora para librarnos y enviar su favor sobre nosotros y esto generalmente ocurre en el peor momento de la prueba. Ese es el momento en el que ya no luchamos para hacer las cosas a nuestra manera. Ms bien, admitimos: Seor, no puedo todo esto es un lo. Te lo entrego a ti.

2. El segundo cambio que ocurre es que ya no estamos abrumados por pensamientos de derrota, de darnos por vencidos: ... segn la misericordia que recibimos, no desmayamos. (2 Corintios 4:1).

Dios quiere que quitemos nuestros ojos de las circunstancias y que dejemos de enfocarnos en lo mal que estn las cosas. La verdad es que puede ser que nuestros problemas no terminen pronto. De hecho, podran empeorar. Y l sabe que si nos enfocamos en cambiar nuestra situacin, caeremos ms profundamente en ansiedad y depresin. Nos cansaremos y desmayaremos, perdiendo nuestra esperanza.

Segn el Seor revela su misericordia hacia nosotros, nuestro desmayo comenzar a desaparecer. Pronto comenzaremos a crecer en la seguridad de que Dios est obrando en nosotros. Y nada satisface ms a nuestro ser interior que saber que Dios tiene su mano sobre m. No he llegado todava pero s que estoy en la direccin correcta. Me estoy moviendo hacia el Seor.

Cada da tu fe se fortalecers ms. l plantar en ti su paz y su reposo. Y t te podrs levantar tan alto sobre tus circunstancias, que nada te podr llevar a desesperarte otra vez.

3. El tercer cambio que ocurrir en nosotros es una renuncia total a las cosas ocultas y deshonestas. Antes bien renunciamos a lo oculto y vergonzoso, no andando con astucia, ni adulterando la palabra de Dios, sino por la manifestacin de la verdad recomendndonos a toda conciencia humana delante de Dios. (2 Corintios 4:2) Esto significa que ya no iremos a las Escrituras tratando de justificar nuestro pecado. No buscaremos excusas para hacer el mal.

Dios desea que nuestra vida sea un libro abierto. Por lo tanto, l anhela que quitemos de nuestra vida todo pecado oculto toda deshonestidad, las cosas clandestinas, engaos, mentiras, fraude. Por eso es que el Espritu Santo busca cada cosa en nosotros que no es semejante a Cristo, Y si de verdad queremos cambiar, estaremos dispuestos a que l trate con nosotros.

Hasta que experimentes el cambio de Dios en cada una de estas reas, te puedes olvidar de recibir consejera, consultar programas de auto-ayuda, o de restaurar relaciones. Pon todo a un lado por el momento, hasta que ests listo a renunciar a todo tu pecado oculto.

Cuando te hayas sometido a la palabra de Dios y al poder transformador de su Espritu, no ser necesario que convenzas a otros de que has cambiado. Segn caminas en su verdad, el Espritu Santo te recomendar a las conciencias de los que estn a tu alrededor, ...por la manifestacin de la verdad recomendndonos a toda conciencia humana delante de Dios.

La palabra griega para recomendar aqu significa aprobacin de Dios. Pablo dice: No tendrs que impresionar a nadie de que t has cambiado. Dios se mover en sus conciencias, dicindoles en su interior: Esta persona tiene mi bendicin y mi aprobacin.

Ningn argumento podr refutar la evidencia interna que el Espritu de Dios ha puesto en ti. De hecho, tu cambio atraer a otros o ser como una reprensin para ellos. El aura de Cristo que emana de ti ser como un golpe a sus propias conciencias. Y ser entonces cuando encontrars el poder para influenciar a otros a travs de los cambios que estn ocurriendo en ti. Encontrars que se restaurarn relaciones. Y podrs recuperar tu autoridad espiritual en tu hogar.

Ya no seguirs pensando en los cambios que tienen que ocurrir en otros. Ms bien, te animars con los cambios que Dios est obrando en ti. Concluirs: Seor, s que todo est en tus manos. Me entrego a tu voluntad. Haz en m lo que tengas que hacer.

Ahora es el momento para dejar todas nuestras circunstancias en sus manos. Olvdate de tratar de salir de tu crisis. Ms bien, enfcate en el Seor que te est cambiando y haciendo de ti un vencedor. Permanece en su palabra. Clama a su nombre diligentemente. Confa en el Espritu Santo. Y que este sea el clamor constante de tu corazn: Cmbiame, oh Seor.

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