CAMINANDO EN LA VIDA DE RESURRECCIÓN Y PODER
En un momento de cansancio, Jesús se detuvo a descansar en un pozo, pero había una mujer perdida que necesitaba ayuda. Una vez más, fue energizado. ¡Cuando sus discípulos volvieron encontraron a su Maestro tan relajado, tan refrescado! "Él les dijo: “Yo tengo una comida que comer, que vosotros no sabéis” (Juan 4:32). ¡Esa es la energía secreta de la vida de resurrección!
A menudo me siento como una batería de automóvil que está seca. Si olvidas apagar la luz de tu automóvil, al día siguiente solo escuchas ese temido ruido: rruu…rruu, el sonido vacío de la maquinaria muerta.
Sé que algo anda mal entre los creyentes de hoy en día, porque se nos ha prometido la misma vida energizante de Cristo. “Y si el Espíritu de aquel que levantó de los muertos a Jesús mora en vosotros, el que levantó de los muertos a Cristo Jesús vivificará también vuestros cuerpos mortales por su Espíritu que mora en vosotros.” (Romanos 8:11).
Qué claro se muestra en la Escritura que el Espíritu Santo mora en nosotros para hacer nacer la vida constante. Dios ha provisto Su energía que entra en nuestros cuerpos mortales y nos da la fuerza física. “Y a vosotros, estando muertos en pecados y en la incircuncisión de vuestra carne, os dio vida juntamente con él” (Colosenses 2:13).
¿Estás lleno del Espíritu Santo? ¡Entonces por fe, echa mano de la nueva vida y energía!
“Bendice, alma mía, a Jehová, y no olvides ninguno de sus beneficios… de modo que te rejuvenezcas como el águila” (Salmo 103:2,5). Tito también habla de esto: “no por obras de justicia que nosotros hubiéramos hecho, sino por su misericordia, por el lavamiento de la regeneración y por la renovación en el Espíritu Santo, el cual derramó en nosotros abundantemente por Jesucristo nuestro Salvador” (Tito 3: 5-6).
¡Gracias a Dios por la presente la grandeza de nuestro Señor Jesucristo! ¡Apropiarte de ello por la fe y camina en la vida de resurrección y poder!