El Mandato: “Sígueme”
El mundo está lleno de mucho quebrantamiento. La gente está buscando respuestas y un propósito en sus vidas. Esta generación tiene tantos miedos y dudas, tratando de descubrir quién es Dios y qué quiere de nosotros.
Un escritor particular de los evangelios lo habría entendido bien. Probablemente Mateo creció en un hogar judío tradicional; había oído todas las historias del Antiguo Testamento y visto toda la religión. Sin embargo, algo había salido mal; él se convirtió en recaudador de impuestos para el Imperio Romano, y éstos eran puestos en la misma categoría que las rameras, los traidores y los pecadores. En su evangelio, Mateo da un poco de su testimonio. “Pasando Jesús de allí, vio a un hombre llamado Mateo, que estaba sentado al banco de los tributos públicos, y le dijo: Sígueme. Y se levantó y le siguió” (Mateo 9:9).
Mateo habría tenido todo el dinero y los conocimientos religiosos y, sin embargo, por dentro estaba tan quebrado y vacío. Entonces tuvo una revelación de Jesús. Habría perdido su trabajo para seguir a Cristo. Probablemente renunció a su riqueza y tal vez incluso perdió las relaciones con su familia. Se habría enfrentado a la persecución de los líderes religiosos de su época. Según la historia de la iglesia, él se convirtió en misionero en el norte de África y finalmente murió como mártir por el Evangelio.
Estoy seguro de que si pudieras preguntarle a Mateo: “¿Lo harías todo de nuevo? ¿Seguirías a Cristo fuera de esa mesa de impuestos, sabiendo cómo cambiaría tu vida, lo que te costaría?” Él respondería: “Sí. Cien veces más”.
Hay algo tan definitorio sobre la autoridad, el poder y el amor de Dios cuando realmente lo encontramos. Creo que Dios nos está llamando a levantarnos porque la iglesia y el mundo necesitan desesperadamente ver el corazón de Dios viviendo a través de ellos. Así como Jesús quería sanar en la generación de Mateo, Dios quiere volver a moverse en esta generación. Esta es la expresión de la compasión de Cristo de la que Mateo fue testigo y escribió: “A la verdad la mies es mucha, mas los obreros pocos. Rogad, pues, al Señor de la mies, que envíe obreros a su mies” (Mateo 9:37-38).
Existimos con el propósito de llevar la Palabra y el poder del Espíritu Santo a los espacios quebrantados. Al igual que con Mateo, Cristo nos dice: “Sígueme”. Si obedeces, tu vida nunca será la misma.
John Bailey es el director de operaciones de World Challenge Inc. y el pastor fundador de The Springs Church en Jacksonville, Florida. John ha estado sirviendo al Señor en el ministerio pastoral por 35 años, ministrando el evangelio en más de 50 naciones, particularmente como pastor y evangelista en Cork, Irlanda.