Extendiéndonos para Cubrir una Ofensa

Tim Dilena

Una de las historias que siempre me hace reír es la de un hombre que fue rescatado de una isla desierta después de 20 años. Mientras estaba parado en la cubierta del barco de rescate, el capitán le dijo: “Pensé que estuviste varado allí durante 20 años, solo”.

Él respondió: “Lo estuve”.

El capitán preguntó: “Entonces, ¿por qué hay tres cabañas en la playa?”

“Bueno, aquella era donde yo vivía. Esa otra es donde iba a la iglesia. Esa tercera es donde solía ir a la iglesia”.

Hay personas hoy en día que tienen tanta presión interna que se sienten ofendidas por todo, entonces, ¿qué hacemos? Bueno, tienes dos opciones bíblicas cuando has sido herido. O cubres la ofensa o la enfrentas.

Ahora bien, cubrir una ofensa es muy bíblico, pero a veces la gente tiene una idea equivocada al respecto. Lo que tendemos a pensar es: “Solo puedo perdonarte si tú sabes que has hecho algo mal. Solo puedo perdonarte si estás arrepentido”. Esa es una mala interpretación. Jesús perdonó a las personas que lo crucificaron y se burlaron de él. Allí nadie le dijo: “Perdóname”, excepto el ladrón. Esto es importante, amigos, entonces, ¿cómo lo hacemos?

Pedro dijo esto. “Ante todo, tened entre vosotros ferviente amor; porque el amor cubrirá multitud de pecados” (1 Pedro 4:8). ¿Sabes lo que significa esa palabra “ferviente”? Era una palabra que se usaba para los estiramientos de un atleta. Cuando Dios dijo: “Quiero que tengan ferviente amor”, estaba diciendo: “Te voy a estirar, extender un poco. Voy a hacer que esto sea un poco más difícil que simplemente decir: “Te perdono”.

Hay algunas ofensas que creo que Dios quiere que tú absorbas para poder extender misericordia. ¿Por qué? Porque Jesús dijo en Mateo 5:7: “Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia”. No tienes que enfrentarlo todo, todo el tiempo. Es una señal de madurez dejar pasar las cosas a veces.

Si Dios nos perdona, debemos perdonar a los demás. Basamos nuestro perdón en lo que Dios ha hecho por nosotros, no en lo que la otra persona nos ha hecho. La Biblia dice que debido a que se nos ha perdonado mucho, podemos amar mucho (ver Lucas 7:47); y el amor cubre una multitud de pecados cuando tenemos ese fervor por los hermanos. Si no entendemos el perdón, eso significa que no hemos sido perdonados o no entendemos el perdón que Dios nos ha dado. Por eso es tan importante.

Después de pastorear una congregación en el interior de Detroit durante 30 años, el pastor Tim sirvió en el Tabernáculo de Brooklyn en la ciudad de Nueva York por cinco años; y pastoreó en Lafayette, Luisiana por cinco años. Él fue nombrado pastor principal de la Iglesia Times Square en mayo de 2020.