La Promesa de la Presencia de Dios
No podría contarles a cuántas reuniones de oración he asistido en las que no fue mucha gente y el pastor dijo: “Todo lo que sé es que Jesús dijo que donde dos o tres personas están reunidas, allí estoy yo”.
Tengo la sospecha de que Jesús no nos estaba dando una excusa para cuando tenemos baja asistencia. Seamos honestos, la Biblia está llena de personas que conocieron a Dios por sí mismas y no con dos o tres personas.
El contexto es el vital aquí. Este versículo resume la gran idea de Jesús sobre arreglar una relación rota. Escucha los versículos que vienen antes. “si tu hermano peca contra ti, ve y repréndele estando tú y él solos; si te oyere, has ganado a tu hermano. Mas si no te oyere, toma aún contigo a uno o dos, para que en boca de dos o tres testigos conste toda palabra. Si no los oyere a ellos, dilo a la iglesia; y si no oyere a la iglesia, tenle por gentil y publicano… Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos” (Mateo 18:15-17,20).
Yo creo que Jesús estaba diciendo: “Cuando decides arreglar una relación en mi casa, quiero que sepas que cuando tengas a las partes en la habitación, mi presencia planea estar allí”. La Biblia nos recuerda una y otra vez que no solo necesitamos a Dios, también necesitamos que las personas formen parte de nuestras vidas. Dios diseñó la vida de tal forma que funciona mejor con personas que en aislamiento.
El hecho de que las relaciones sean difíciles no significa que debamos renunciar a la comunidad. El conflicto en sí no es malo, pero los conflictos no resueltos sí lo son. Eso crea un entorno tóxico.
Yo creo que por eso Pedro respondió a las palabras de Jesús preguntando cuántas veces debemos perdonar. Jesús no lo evadió. Le dijo: “No te digo hasta siete, sino aun hasta setenta veces siete” (Mateo 18:22). Jesús no solo está comprometido con tu relación con él; está comprometido con las relaciones saludables con otras personas que están en tu vida, incluso si se necesitan 490 veces para resolverlas por dentro y por fuera.