ENTRENADOS EN LA GUERRA ESPIRITUAL
Cuando conociste a Jesús, te convertiste en una nueva creación con un espíritu nuevo, una mente nueva, un corazón nuevo. Sin embargo, aunque te hiciste seguidor de Jesús y todo tu mundo cambió, el espíritu del mundo que te rodea no cambió. De hecho, los poderes de la oscuridad se alinearon contra ti.
Vemos en 1 Samuel 17:1 que “los filisteos juntaron sus ejércitos para la guerra, y se congregaron en Soco” Todo creyente sabe que las fuerzas de la oscuridad están dispuestas contra los seguidores de Jesús. Los poderes del enemigo se reúnen alrededor de aquellos que caminan en la autoridad del Espíritu Santo y comienzan a enfrentar dificultades en una nueva dimensión. Verás, el enemigo está determinado en hacerte fracasar en tu nueva relación con Jesús y a cada demonio en el infierno se le ha asignado la misión de atacarte.
Estos ataques pueden manifestarse como depresión, desánimo o miedo abrumador. Algunos de ustedes pueden comenzar a experimentar nuevas tensiones en su matrimonio o un aumento en sus dificultades financieras. Si tu batalla llega inesperadamente, te preguntarás: “¿Qué está pasando? ¿Dios me ama? ¿Sobreviviré?”
¡Estoy feliz de darte buenas noticias! Cuando experimentes el aumento de los poderes de las tinieblas en tu contra, ten la seguridad de que Dios lo está permitiendo temporalmente para poder entrenarte en la guerra espiritual. Cuando reconoces que tus esfuerzos humanos no pueden vencer al enemigo, Dios interviene al clamar a él. Esto es exactamente lo que sucedió con David cuando triunfó sobre el gigante Goliat. “Porque de Jehová es la batalla, y él os entregará en nuestras manos” (1 Samuel 17:47).
David fue ungido y prevaleció sobre un enemigo formidable, tal como tú lo harás cuando busques la ayuda de Dios. Cuando Jesús avance y conquiste al gigante en tu vida, estarás lleno de poder, valentía y fortaleza del Señor.