Estas creciendo en la gracia?
Una pregunta ha estado en mi mente en las ltimas semanas. Creo que es una pregunta que todo creyente sincero debe hacerse contnuamente: Estoy creciendo en la gracia?
Para m, la gracia es el poder del Espritu Santo que nos hace parecer ms a Jess. Por lo tanto, crecer en la gracia significa aumentar en la semejanza de Cristo a travs del poder inmerecido del Espritu de Dios. Ahora permteme volver hacer mi pregunta en estos trminos: Estoy confiando en el Espritu Santo para hacerme ms como Jess - en mi hogar, mi ministerio, mis relaciones?
Esta pregunta se aplica especialmente a cristianos maduros -- gente que ha edificado un fundamento espiritual a travs de los aos mediante el estudio constante de la biblia, una consistente vida de oracin y una enseanza santa. Si esta te describe permteme preguntarte: Despus de todo tu estudio, oracin y aprendizaje, estas volvindote ms como Jess? Eres ms compasivo, manso, perdonador de lo que fuiste para este tiempo hace un ao? O, tu crecimiento se ha estancado? Te has conformado con una posicin de crecimiento cero?
Aqui tienes una manera para saber si estas creciendo en la gracia: Dios ha sido misercordioso contigo--Asi que, eres misericordioso con los dems? Si no estas seguro, haz esta pregunta: Cmo respondes a las heridas que otros te hacen? Eres amable y gentil? O, te enojas y amargas? Eres paciente y comprensivo o irritable y argumentativo?
Quiero dirigirme especialmente a los lectores que estan involucrados en ministerio -- pastores, ancianos, laicos; todos los que han sido escogidos por Dios para llevar una vida ejemplar delante de otros. Creo que la pregunta del momento para todos nosotros es esta: En qu direccin estoy yendo? Estoy creciendo en la gracia en mi llamado - O, me estoy volviendo menos considerado?
Da una mirada honesta a tu vida desde el ao pasado. Piensa en todas las pruebas que has atravesado -- en tu hogar, en tu trabajo, en los esfuerzos de tu ministerio. Muchos de mis amigos en puestos de liderazgo cristiano me dicen que el ao pasado enfrentaron las pruebas ms intensas de sus vidas.
Puedes decir honestamente que has reaccionado ante todos tus problemas con fe, gracia, amor y misericordia? Has aprendido a travs de todos los problemas ha ser ms bondadoso, paciente, gentil y apacible? O tienes que admitir, como yo, que has reaacionado con momentos de ira, palabras duras y de autocompasion -- reacciones que han causado una tension intensa y noches de insomnio?
Todos deberamos preguntarnos: He reaccionado a mis crticos y enemigos con compasin, amor, misericordia y perdn? O, he reaccionado con clera, indignacin y autojustificacin? Tuve que probar que estaba correcto y que ellos estaban equivocados? Cuntas heridas he causado en otros mientras trataba de demostrarles cun herido, mal entendido, y tergiversado estaba?
Era ms importante para mi mantener mi necesidad de que estaba correcto que humillarme y dar la otra mejilla? Reaccion hiriendo y resentido, cuando debi ser sanador y reconciliador?
El apstol Pedro describe un da asombroso cuando los cielos pasaran, los elementos de la tierra se derritan y todo en la creacin sera deshecha. Por lo tanto, Pedro dice, que deberamos estar contnuamente preparados y anhelando el regreso del Seor:
pues estis amonestados, guardaos que por el error de los abominables no seis juntamente extraviados, y caigis de vuestra firmeza. (2 Pedro 3:17) Pues como todas estas cosas han de ser deshechas, qu tales conviene que vosotros seis en santas y pas conversaciones, (versculo 11) estando en esperanza de estas cosas, procurad con diligencia que seis hallados de l sin mcula, y sin reprensin, en paz. (versculo 14)
La frase que me convence mas profundamente es la advertencia de Pedro en el versculo 17: no sea que. l nos desafa, diciendo: Eres un amante de Jess. Dices estar listo y anhelando el regreso del Seor. Y siempre estas advirtiendo a otros que hagan lo mismo. Pero, ests viviendo como si Jess nunca fuera a regresar?
Se supone que eres un ejemplo para el resto de la iglesia de Cristo. As que- Ests en paz con todos los que conoces? Tienes un andar sin culpa delante del Seor? Te advierto no pienses que no puedes caer de tu andar firme. Tu tambin puedes ser arrastrado por el error de los incuos.
Cul es el error de los incuos que Pedro menciona en el verso 17? Es la idea equivocada que Jess no est realmente a la puerta. Es una trgica complacencia una falta de preocupacin, una demostracin descuidada en la conversacin y estilo de vida en esta hora final.
Cuando Pedro usa la palabra envolvindose aqu, l no est hablando acerca de gente que ha vuelto atrs a sus pecados groseros, como adulterio y alcoholismo. l est hablando de aquellos que son atrados a actitudes carnales y motivaciones que ellos tenan antes de conocer a Cristo.
Puedes testificar que eres salvo, justificado, santificado; que has escapado las lujurias de esta era malvada; que eres bendecido con conocimiento intimo de Jess. Pero, Pedro advierte: Existe un peligro de ser desencaminado del crecimiento. Puedes ser conducido de nuevo a la esclavitud de la amargura y venganza...a un espritu duro, sin misericordia, que no perdona...de una actitud no caritativa. Si tu caes de nuevo en cualquiera de estos caminos, estars peor que cuando no conocias a Jess.
Pablo advirti a los Efesios: no seamos nios fluctuantes llevados por doquiera de todo viento de doctrina (Efesios 4:14). Tu puedes pensar, Este versculo no es para m. Mi base es bblicamente slida. Yo no soy llevado por todas esas nuevas modas del evangelio y esos frvolos avivamientos que estn distrayendo a la gente de Cristo. Yo estoy arraigado y fundado en la palabra de Dios.
Sin embargo, escucha el resto del versculo ...llevados por doquiera...por estratagema de hombres que para engaar emplean con astucia las artimaas del error (mismo versculo). Tal vez no puedas ser engaado por falsa doctrina. Pablo dice que podras ser arrastrado por otra cosa completamente diferente. l esta preguntando: Eres llevado por los planes malvados de aquellos que se te oponen?
El mensaje de Pablo nos llama a examinarnos una vez ms: Cmo reaccionamos hacia gente que se llaman asi mismo nuestros hermanos y hermanas en Cristo, y aun as, difunden mentiras acerca de nosotros? Cmo respondemos cuando ellos cuestionan nuestros intereses, tergiversndonos, pareciendo que quieren destruirnos? Cul es nuestra respuesta cuando nos hieren y lastiman al punto de hacernos llorar?
Cuando Pablo ordena: No seamos nios, l nos est diciendo, Esos enemigos tuyos aquellos que usan chisme, calumnias, fraudes y manipulacin, astucia y maa, engao y simulacin dejame decirte, todos ellos son hijos rebeldes. Ellos estan desviados y corrompidos. Y no han permitido que la gracia de Dios obre en ellos. Asi que, no caigas en su maldad, sus juegos infantiles. Ellos quieren que tus reacciones a su maldad como lo hara un nio. Pero tu no tienes que contestarles con nieras.
Alguna vez has visto como se comportan los nios en el parque? En cuestion de minutos estan diciendo todo tipo de desdeas. Constantemente corren a cualquier adulto a quejarse de cualquier pequea herida. Y comienzan a discutir con otros nios, una batalla contnua de acusamiento y niego: No lo hice! Si lo hiciste! No lo hice! Si lo hice!
Tristemente muchos cristianos caen en estas nieras, juegos tortuosos. Conozco a algunos que usan las cartas o correo electrnico para continuar esta clase de quin tira ms fuerte de la cuerda. Un hermano cristiano de un lado del mundo envio una carta e-mail a su amigo, acusandole: Mi querido hermano en Cristo, me has acusado falsamente, manchando mi carcter. Has pecado no solamente contra m, sino en contra del Seor. Te das cuenta que has tocado al ungido del Seor? Estoy orando para que el Seor te muestre el peligro de difundir rumores de m.
Vuelve un e-mail del recibidor: Amado amigo, no puedo creer el reciente email que me enviaste. Me has acusado falsamente de chisme y calumnia. Niego todo lo que dijiste que yo dije. Tomaste mis palabras completamente fuera de contexto. Me debes una disculpa.
Y aqu viene la respuesta: Querido Bill, cmo te atreves a negar que dijiste lo que yo s que dijiste? Un amigo mio me dijo cada palabra que tu dijiste sin embargo, ahora niegas que lo dijiste. Estoy convencido que lo dijiste. Asi que no me digas que no dijiste lo que mi amigo dijo que dijiste, porque tu realmente lo dijiste.
Vuelve la respuesta a la respuesta de la respuesta del e-mail original: Escucha bien, Jim. Solo te lo voy a decir una sola vez: Yo no lo dijepunto. Dios te bendiga. Esta sera mi ultima comunicacin contigo. Paz del Seor Jess sobre ti.
Ellos estan atrapados en el mismo juego infantil del parque "No lo hice!" "Si lo hiciste!"
En el siguiente versculo, Pablo nos insta a que avancemos a la madurez: Sino que siguiendo la verdad en amor, crezcamos en todo en aquel que es la cabeza, esto es, Cristo (Efesios 4:15). l est diciendo: Tu no puedes remediar esos menosprecios que recibes, las heridas que te hacen, el chisme hablado en contra tuyo, el fraude y engao apuntado hacia ti. Sin embargo, puedes usar estas cosas para crecer en la gracia. Mralas como oportunidades para ser ms semejante a Cristo. Responde suavemente con un espritu manso. Perdona aquellos que rencorosamente te usan.
Conozco un precioso ministro jven que fue herido por un pastor mayor. El mayor le hizo una gran injusticia--y cuando el jven predicador lo supo, el joven ministro le lanzo un hiriente e-mail. Los dos hombres intercambiaron varios candentes e-mails antes que el jven ministro viniera a m confundido. l puso copias de los e-mail sobre mi escritorio y dijo Hermano David, yo no soy vengativo. Pero cuando vi lo que este hombre hizo, realmente me hirio. As que le lanze. Qu debo hacer ahora? Puede mirar esto y aconsejarme?
Le di un vistazo a las copias que estaban arriba y rpidamente me di cuenta que los dos estaban reaacionando como nios. El Espritu Santo me dijo exactamente lo que se necesitabahice las copias a un lado. Y le dije al jven ministro. Hijo, llama a ese pastor personalmente. Perdnalo, muestrale misericordia y animalo. Solo malo.
El jven ministro hizo exactamente eso y Dios san su amistad. El gozo del Seor lleno el corazn de ambos, sanando sus heridas. Y todo lo que se necesit fue una llamada telefnica.: Hermano, esto es incorrecto. Lo amo. Pongamos esto bajo la sangre y el poder sanador de Cristo.
Ninguna palabra corrompida salga de vuestra boca, sino la que sea buena, para la necesaria edificacin. A fin de dar gracia a los oyentes. Y no contristeis al Espritu Santo de Dios (Efesios 4:29-30). La palabra raz que Pablo usa para edificar aqu significa constructor. Esa palabra a la vez, quiere decir construir. En resumen, cualquiera que edifica est construyendo la casa de Dios, la iglesia.
Pablo nos est diciendo tres cosas importantes sobre las palabras que nosotros hablamos: 1. Tenemos que usar nuestras palabras para edificar al pueblo de Dios. 2. Tenemos que usar nuestras palabras para ministrar la gracia a otros. 3. Es posible contristar al Espritu Santo con nuestras palabras.
Quedo bajo profunda conviccin mientras leo la vida de algunos gigantes espirituales del pasado. Estos hombres y mujeres santos estaban celestialmente inspirados -- estudiosos en la palabra de Dios, oraban con frecuencia y estaban preocupados de el crecimiento en la gracia. Andrew Bonar, una de las almas de oracin el siglo diecinueve, se levantaba cada da a la 4 a.m para buscar al Seor al lado de su cama. Cuando murio, los ancianos encontraron dos hendiduras gastadas en el piso de madera donde el se arrodillaba para orar. Otros hombres y mujeres santos como l, gente llena de gracia, amor y pureza hacan que los pecadores se derritieran en su presencia. Mientras estos santos simplemente caminaban por la calle, la conviccin del Espritu Santo caa sobre los que pasaban.
Sin embargo, lo que ms me impacta de la vida de estas personas no es solo su devocin a Cristo o la intensidad de sus oraciones. Tambin es el fruto santo que estas cosas producan en ellos. Adems, descubr una fibra comn entre estos gigantes espirituales: Su preocupacin principal era crecer en la gracia de un corazn puro del cual la conversacin santa fluira. Porque de la abundancia del corazon habla la boca (Mateo 12:34).
Ya sea en sus hogares, sus servicios pblicos o con sus amigos o compaeros en todo tiempo y en todos los lugares, esta gente buscaba crecer en la gracia: tener una conversacin santa sin engao. Su meta principal era tener una conversacin digna de Cristo, sin comunicacin corrupta saliendo de sus bocas.
He visto a cristianos comunes volverse poderosos en Dios, simplemente pidindole al Espritu de Dios que limpie su conversacin diaria. Una vez esta gente amaba alimentarse de chismes, pero ahora les duele simplemente escucharlos. Ya no lo eschuchas regaando, criticando o desgarrando a otros. Ahora lo unico que les escuchas hablar son palabras edificantes. Hablan el lenguaje de una amorosa amabilidad del bien, edificantes, cosas de la gracia. Para m, estas personas se han convertido en gigantes espirituales tambin.
Como ministro del evangelio, he querido desesperadamente mantenerme en el favor y bendicin de Dios. Y, una vez en mi ministerio, le rogu al Seor que mostrara cmo bendecirle y agradarle mejor. El Espiritu Santo puso dos cosas en mi corazon:
- No hagas provisin para los deseos de la carne
- En todo tiempo, que tu conversacin sea digna de Cristo.
Creo que la mayora de los amadores de Jess estan conscientes del primer punto. Pero, estamos tan preocupados por el segundo? Segn Pablo, tenemos que juzgar todo lo que decimos todas nuestras conversaciones, comunicaciones y reacciones por este simple criterio: Mis palabras, estan edificando la casa de Dios o la estan derribando?
Esta pregunta se aplica especialmente cuando fuimos heridos por alguien. Respondemos a las heridas, edificando el cuerpo de Cristo o derribndolo? Reaccionamos con palabras que restauran, sanan y animan o lejos de eso destruimos la casa de Dios?
David no adquiri su ttulo de un hombre conforme al corazn de Dios instantneamente. No l tuvo que crecer en eso. Y una de las formas en que l lo hizo fue edificando a su peor enemigo. Sal us todo medio posible para tratar de destruir a David. Sin embargo, nada de lo que Sal hizo pudo detener a David de honrrarle y respetarle.
Sal estaba celoso de David. Minti acerca de l, robndole su reputacin. Trat de desacreditar a David delante de sus amigos ms cercanos. Y llam a otros para que se opusieran a David. Finalmente, persigui a David fuera de Israel. Y destruy a aquellos que trataron de defender a David. Simplemente, Sal no dio tregua a David.
Ocasionalmente, Sal se arrepinta, confesando sus malos actos a David. l lloraba como un nio, Lo lamento, David por favor, perdname. Pero pronto persegua a David con mayor odio.
Creo que de toda la gente mencionada en la escritura, David soport el ms vil, despreciable maltrato que cualquier otro aparte de Cristo. Y todo esto vino de un hombre que una vez am mucho a David Sal. Sin embargo, en toda oportunidad, David respondi amando y honrando a Sal.
Una vez, Sal asesin a ochenta y cinco sacerdotes santos de la ciudad de Nob. Abiatar, el hijo de uno de estos sacerdotes asesinados, escap y busc refugio con David. Mientras el jven contaba la horrible masacre, los siervos de David estaran airados. Probablemente pensaron Ahora David puede asaltar el campamento de Sal y matarlo con buena causa. Nuestro capitn tiene la ley a su favor. Tiene todo derecho escritural para tomar el reino de este asesino. Seguramente que Israel estar horrorizado al escuchar que Sal asesin a ochenta y cinco sacerdotes a sangre fria.
Sin embargo, cuando David escuch lo ocurrido, l inclin la cabeza y llor. De hecho, l tom la culpa por los asesinatos personalmente. El dijo a Abiatar, Yo he ocasionado la muerte a todas las personas de la casa de tu padre (1 Samuel 22:22). David era totalmente inocente sin embargo, l estuvo dispuesto a cargar con la culpa de otro hombre. Creo que en ese momento, David comenz a crecer en la gracia. Fue un paso gigantesco a ser un hombre conforme al corazn de Dios.
En otra ocasin, Sal estaba persiguiendo a David tratando de matarlo. El y sus hombres se detuvieron para descansar en una cueva, sin saber que David y sus hombres estaban escondidos ms profundamente dentro de la misma cueva. Mientras Sal y sus hombres dormian, los ayudantes de David comenzaron a conspirar, Este es tu da de victoria y venganza. Dios ha puesto a Sal en tu mano. Matmoslo ahora, mientras podamos. Puedes ser rey antes que acabe el da.
Pero David se rehus. Al contrario, cort un trozo del vestido de Sal antes de escapar. l lo quera como evidencia para probarle a Sal ms tarde que l pudo haberlo matado. Pero la escritura dice, Despues de esto se turb el corazn de David, por que habia cortado la orilla del manto de Sal(24:5).
De una distancia segura David llam a Sal en agona. Mientras Sal salia de la cueva, David se humill ante el rey, inclinndose hasta la tierra e incluso llamandole padre(24:11). Despus David dijo: Mi mano no ser contra ti (24:12). El estaba diciendo, Puedes hacerme lo que quieras Sal. Puedes perseguirme, acosarme, incluso tratar de matarme. Pero nunca levantar mi mano en contra tuya. Si voy a ser vengado, el Seor tendr que hacerlo.
Ms tarde cuando David se enter de la muerte de Sal, el no se regocij ni declar que la justicia de Dios fue cumplida. El nunca dijo: Gracias a Dios he sido vengado. Saul se lo estaba buscando. No David rasg su vestidura y llor. Lloraron y lamentaron y ayunaron hasta la noche, por Sal. (2 Samuel 1:12). Y endech David a Sal...Ha perecido la gloria de Israel sobre tus alturas... Cmo han cado los valientes! (1:17, 19).
A veces recuerdo mis tiempos de prueba cuando compaeros ministros me calumniaban tanto que me redujeron a lgrimas. Mientras leo mi diario hoy, pienso, Seor, qu pesadilla. Pens que mi dolor nunca acabaria.
Sin embargo durante esos tiempos, usualmente no respond con gracia y perdn como David lo hizo. En cambio, repeta mis historias de miseria y maltrato a mis compaeros. Yo nombraba a la gente que me hiri y volvia a contar las cosas malvadas que me hicieron. Estaba reaccionando como un nio haciendo pucheritos y fui tan culpable como aquellos que me calumniaron.
Mi conversacin no era digna de Cristo en aquellos das. Sin embargo, en los aos recientes, me he comprometido a buscar el perdn de todas las personas con las caules reaccion con falta de gracia. Y he tratado de estar en paz con toda persona que conozco.
Pablo hace una lista de seis cosas que tenemos que sacar de nuestras vidas si vamos a crecer en la gracia de Cristo: Quitense de vosotros toda amargura, enojo, ira, griteria y maledicencia y toda malicia (Efesios 4:31).
Muchos cristianos piensan que una vida de santidad consiste de oracin diligente, intenso estudio bblico y servir a otros sacrificadamente. Ciertamente, todas estas cosas contribuyen a la santidad. Sin embargo, no nos atrevemos a pasar por alto estos seis temas en la lista de Pablo. El apstol dice que nosotros tenemos que encarar estas cosas si vamos a crecer en la gracia. Puedes ser un misionero, ofreciendo tu vida en sacrificio, sin posesiones, pasando todo tu tiempo en el servicio a los dems. Pero si ignoras las cosas que Pablo menciona aqu, tu contristars al Espritu Santo. Tu crecimiento se estancar y terminars como un zombi espiritual.
Las tres primeras cosas en la lista de Pablo son amargura, enojo e ira estas se explican por s solas. Amargura es rehusar soltar una herida pasada o perdonar un dao pasado. Enojo es una fortaleza de resentimiento mezclado con la esperanza de vengarse. Ira es exasperacin ya sea una explosin rpida o una indignacin lenta y candente hacia alguien.
Ya hemos hablado acerca de maledicencia o palabras que destruyen. Asi que miremos las dos cosas que quedan -- griteria y malicia. Qu quiere decir Pablo con esto?
Mientras estaba trabajando en este mensaje, tom un descanso y fu a la habitacin donde mi esposa estaba limpiando. Me d cuenta que el enorme y pesado ropero haba sido movido al centro de la habitacin. Obviamente, Gwen lo habia movido para poder limpiar detrs de l.
Nada me enfada ms que cuando mi esposa trata de mover muebles pesados sin mi ayuda. Siempre temo que se vaya a lastimar. Durante nuestro matrimonio le he rogado No trates de hacer esto por t sola, simplemente llmame y yo te ayudar.
Cuando vi que lo haba hecho estalle: Cun estupido puede ser esto? Pudiste haberte lastimado. Por qu no me llamaste? Tu sabes como me siento sobre esto. Mov el ropero a su lugar anterior, todo mientras refunfuaba: De todas las cosas estpidas, y sin pensar. No vuelvas a tratar de hacer esto. T no eres Supermujer.
Cuando regres a mi estudio, inmediatamente llegue a la palabra gritera. Le pregunt al Espritu Santo que me mostrara su significado. l respondi rpidamente: Gritera fue lo que le hiciste a tu esposa. Una gritera es una explosin repentina por nadaun ruido fuerte e innecesario hecho sin propsito alguno. Causamos gritera, cuando hacemos algo grande de algo insignificante, o hacemos una escena en vez de tratar de ayudar o sanar.
Inmediatamente me di cuenta lo que haba hecho. Fui donde Gwen y me disculpe Cario, perdname. No hice nada aqui sino una gritera.
La ltima palabra en la lista de Pablo es malicia. Malicia es el deseo de ver a alguien sufrir. Para muchos cristianos, malicia significa desear que Dios castigue a alguien que lo ha herido. Es un espritu diablico y usualmente est escondido bien profundo en el corazn. En efecto, la mayora de los creyentes nunca expresan su malicia. Pero con el tiempo, sta se levanta cuando se enteran que su enemigo ha cado. Quizs tengan un momento breve de satisfaccin o incluso expresar dolor por la persona herida pero an tienen un espritu de malicia
Cuando Pablo dice: Quitense de vosotros, El no est hablando de un arreglo rpido. l est describiendo un proceso un asunto de crecimiento que toma tiempo. A veces, podemos fallar al tratar de deshacernos de estas cosas malignas. Pero si rapidamente nos arrepentimos y prometemos arreglar las cosas con la otra persona, con el tiempo estas cosas desapareceran.
Jess aclara: No podemos aferrarnos a no perdonar, a la ira o malicia. Si nosotros no nos deshacemos de esta cosas mortales en nuestras vidas, permaneceremos sin el perdn de nuestros propios pecados. Entonces, nuestras iniquidades se amontonarn contra nosotros, a pesar de nuestra devocin y buenas obras (ver Mateo 6:14-15).
Asi que, examina tu vida cuidadosamente. Y recuerda estas definiciones: la gracia es el poder del Espritu Santo para hacernos ms como Jess. Y creciendo en la gracia es crecer en el parecido de Cristo a travs del poder de Espritu. Finalmente mantnte hacindote esta pregunta: Me estoy pareciendo ms a Jess, confiando en poder del Espritu Santo?