LLEVADOS A UN LUGAR SEGURO
Puedes sentirte feliz, saludable y estar en la cima del mundo en este momento. Si es así, probablemente no necesites este mensaje. Pero si te sientes deprimido por alguna razón, bajo una carga de dolor o pena, soledad o sufrimiento, este mensaje es para ti.
Los cristianos más santos a veces experimentan pruebas tan pesadas que se preguntan si Dios está dejando que ellos carguen más de lo que pueden soportar. Su angustia casi los aplasta y están al borde de la desesperación. Grandes hombres y mujeres de fe han experimentado pruebas oscuras y profundas, pero Dios los ha llevado a la victoria porque pusieron su confianza en él.
Dios todavía permite tiempos de prueba, tiempos durante los cuales el alma pasa por una feroz tribulación que, según la Palabra de Dios, es para probarnos. “Amados, no os sorprendáis del fuego de prueba que os ha sobrevenido, como si alguna cosa extraña os aconteciese” (1 Pedro 4:12). El profeta Jeremías predijo que los santos de Dios serían probados con fuego: “He aquí que yo los refinaré y los probaré” (Jeremías 9:7).
Cualquier crecimiento espiritual que tenga lugar en nuestra vida siempre estará acompañado de pruebas, porque “él conoce mi camino; me probará, y saldré como oro” (Job 23:10). Si bien es natural que queramos protegernos de las dificultades, es un acto de fe confiar todas nuestras circunstancias a nuestro Padre amoroso.
Evita a los cristianos que te dicen: “Si estuvieras realmente viviendo en las promesas de Dios y viviendo por fe, siempre serías feliz y próspero. Deberías estar alabando a Dios y sonriendo y regocijándote. Debes tener una mente positiva”.
¡No es así! Lo que tienes es fe en que Dios nunca te dejará ni te desamparará, ni siquiera en tu hora más oscura. Dios siempre es Dios, él sigue en el trono y escucha y responde tu oración. Él se preocupa por ti y sus promesas nunca te fallarán. ¡Espera en silencio en el Señor, en que él te llevará a un lugar seguro!