Profundizando en el Amor de Dios para Ti
“Pero vosotros, amados, edificándoos sobre vuestra santísima fe, orando en el Espíritu Santo, conservaos en el amor de Dios, esperando la misericordia de nuestro Señor Jesucristo para vida eterna” (Judas 20-21). La Biblia está llena de la verdad del amor de Dios, pero a veces podemos preguntarnos cómo el Señor podría amarnos.
Millones de creyentes que han probado el amor de Dios nunca han aprendido a entrar en la plenitud de su amor. Conocen la doctrina de su amor, la han oído siendo predicada a menudo, pero no saben lo que significa conservarse, mantenerse en su amor.
Juan 3:16 dice: “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna”. La revelación del amor de Dios viene en parte por el poder del Espíritu Santo cuando nacemos de nuevo. Es un momento maravilloso cuando entiendes esta verdad y te das cuenta: “Dios me amó cuando yo era un perdido, un deshecho, un extraño; y demostró su amor al sacrificar a su propio hijo por mí”.
Después de esta revelación inicial, los cristianos deben aprender cómo mantenerse en el amor de Dios. El Padre ama a su pueblo con el mismo amor que tiene por Jesús, quien está sentado a su diestra. En su oración final en la tierra, Jesús dijo: “Me has amado desde antes de la fundación del mundo” (Juan 17:24). ¡Qué pensamiento tan increíble! Cristo fue muy amado por el Padre antes de la creación, antes de que se formara cualquier planeta, antes de que el sol, la luna o las estrellas vinieran a la existencia, antes de la creación del hombre.
Entonces Jesús siguió con esta oración extraordinaria: “Para que el amor con que me has amado, esté en ellos, y yo en ellos” (17:26). Él decía: “Padre, yo sé que tú vas a amar a los que estoy treyendo a mi cuerpo tal como me has amado a mí”. Como puedes ver, según Jesús, a los ojos de Dios, Cristo y su Iglesia son uno.
Mantente en el gran amor de Dios por ti y será tu fortaleza a través de todas las cosas que experimentarás en la vida.