UNA REVELACIÓN DE LA OBRA DE JESÚS
Dios ha prometido a su pueblo un descanso glorioso que incluye paz para el alma. Tristemente, muchos cristianos no tienen idea de lo que significa descansar en su salvación. No poseen la paz que todos los cristianos tienen a su disposición en Jesucristo, la paz que puede llevarlos a través de cualquier tormenta.
Jesús dijo: “Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar. Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas; porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga” (Mateo 11:28-30).
Cristo nos está diciendo muy claramente: “No intentes salir a caminar conmigo hasta que tu alma esté en descanso”. ¿Y cómo entramos en este reposo del que Jesús está hablando? Creo que la clave está en tres palabras que dijo: Aprended de mí.
Jesús no está hablando de un mero conocimiento mental; él está hablando de la disciplina de aprender quién es él y lo que logró en la cruz. Él está diciendo: “Debes comprender lo que he hecho por ti para que tu alma esté en descanso”.
“Pero yo leo la Biblia y oro un poco cada día. Estoy esforzándome mucho por mejorar”. No es suficiente esforzarse mucho y hacer promesas a Dios. Simplemente, se trata de buscar una revelación de lo que Jesús hizo en la cruz. ¡Y esto requiere disciplina! Piensa en la disciplina requerida para convertirse en un médico, un maestro, un ministro, una enfermera. Cualquier carrera o llamado requiere un gran estudio y esfuerzo; y sucede lo mismo cuando se trata de servir realmente a Jesús como deberíamos.
¡Determina en tu corazón, aplicarte para buscarlo diligentemente! Toma el tiempo y haz el esfuerzo de aprender verdaderamente de él para que puedas caminar en una comunión más profunda con tu Salvador.