ABUNDA EN ESPERANZA
“Y el Dios de esperanza os llene de todo gozo y paz en el creer, para que abundéis en esperanza por el poder del Espíritu Santo” (Romanos 15:13, énfasis añadido).
Según Pablo, cuando se trata el asunto de la esperanza, la obra del Espíritu Santo tiene que ser incluida. Así que, ¿cómo podemos abundar en esperanza, como Pablo oró? ¿Cómo nos podemos regocijar en esperanza? y ¿Cómo podemos obtener la seguridad plena de ello? En la salvación, se siembra una semilla de esperanza, por supuesto, pero durante nuestro caminar con Jesús debe haber una madurez de dicha esperanza.