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Devocionales en Español

UNA OLA DE QUEBRANTAMIENTO

David Wilkerson

Medio día de predicación no fue suficiente para los hambrientos israelitas. Querían más de la palabra de Dios. Así que formaron grupos, con diecisiete ancianos en adición a Esdras, para estudiar la palabra el resto de día. Ellos hacían entender al pueblo la ley: "Y leían en el libro de la ley de Dios claramente, y ponían el sentido, de modo que entendiesen la lectura" (Nehemías 8:7-8).

A medida que el pueblo asimilaba la ley de Dios, empezaron a gemir por sus pecados. “todo el pueblo lloraba oyendo las palabras de la ley” (8:9).

CATADORES DE SERMONES

David Wilkerson

Quizás oíste el término “catadores de sermones”. Este término tiene casi 200 años de antigüedad. Se originó en Londres a mediados del siglo XIX. En aquella época, el gran predicador C.H. Spurgeon daba sermones a cinco mil personas cada domingo en el Tabernáculo Metropolitano de Londres. Al otro lado de la ciudad, José Parker también predicaba mensajes ungidos y otros pastores fervientes predicaban por todo Londres, dando palabras proféticas profundas y reveladoras.

HAMBRE DE LA PALABRA DE DIOS

David Wilkerson

"El gozo de Jehová es vuestra fuerza" (Nehemías 8:10). Cuando estas palabras fueron proclamadas, los israelitas acababan de volver del cautiverio en Babilonia. Bajo el mando de Esdras y Nehemías, el pueblo había reconstruido los muros caídos de Jerusalén. Y ahora pusieron su mirada en el restablecimiento del templo y la restauración de la nación.

LA PRIMERA DE SUS SEÑALES

Gary Wilkerson

La Escritura nos cuenta que en las bodas de Caná estaban allí "seis tinajas de piedra para agua, conforme al rito de la purificación de los judíos, en cada una de las cuales cabían dos o tres cántaros" (Juan 2:6). En obediencia a Jesús, los sirvientes llenaron las grandes tinajas con agua, que milagrosamente se convirtió en un sabroso y delicioso vino tinto.

UN GRAN DESAFÍO

Jim Cymbala

Desafortunadamente, buscar al Señor de todo corazón no nos exime de ataques externos. Después de diez años de paz, el territorio de Asa fue repentinamente invadido por un enorme ejército etíope sin motivo aparente. Asa era bisnieto de Salomón y el hecho de que el siguiera al Señor no le garantizaba un camino sin problemas durante el resto de su vida.

En momentos así, aquellos que buscan a Dios han construido un depósito de fe que está listo para afrontar los nuevos problemas y saben exactamente qué hacer:

EL DIOS QUE PROVEE FIELMENTE

David Wilkerson

Cuando disponemos nuestro corazón para obedecer la palabra de Dios, permitiendo que su Espíritu exponga y mortifique todo el pecado en nuestras vidas, el Señor mismo hace que nos regocijemos. "... y se regocijaron, porque Dios los había recreado con grande contentamiento." (Nehemías 12:43). Creo que este derramamiento de bendición incluye abundante gozo, aún en medio de nuestras pruebas. El Señor abre el cielo y nos bautiza con el "gozo de Jesús" con gritos, regocijo y cánticos, sin importar cuáles sean nuestras circunstancias.

EL GOZO DE JESÚS

David Wilkerson

Donde la palabra de Dios es reverenciada, el resultado inevitable es un derramamiento genuino del "gozo de Jesús".

Nehemías y Esdras le dijeron a la multitud que había vuelto a Jerusalén: "Ustedes han estado entusiasmados con la palabra de Dios - hambrientos por ella, amándola, permitiendo que obre en sus corazones. Se han arrepentido, llorado y entristecido - y Dios se ha complacido con ustedes. Pero llegó el tiempo de regocijarse. Saquen sus pañuelos y sequen sus lágrimas. Este es un tiempo de gran gozo y alegría.”

MIRA EL ENEMIGO HUIR

David Wilkerson

“Porque yo derramaré aguas sobre el sequedal, y ríos sobre la tierra árida” (Isaías 44:3)

¿Te ha traído el Señor Su Palabra que sacia la sed? Ha venido a ti en tus períodos de sequía y te ha inundado con Su Espíritu? ¿Estás bebiendo el agua pura de su Palabra?

Si es así, estás listo para reclamar otra promesa del pacto: “Mi Espíritu derramaré sobre tu generación, y mi bendición sobre tus renuevos; y brotarán entre hierba, como sauces junto a las riberas de las aguas.” (Versículos 3-4).

SIMPLE OBEDIENCIA

Gary Wilkerson

En las bodas de Caná de Galilea, María, la madre de Cristo, se dio cuenta que el vino se había acabado y dio instrucciones a los siervos de Su Hijo y les dijo: “Haced todo lo que os dijere” (Juan 2:5)