CRISTO AMA A SU IGLESIA
Cristo ama a Su iglesia. Él entregó Su vida por ella y dijo que las puertas del infierno no prevalecerán contra ella. Jesús mismo es la piedra fundamental de esta iglesia y la Escritura nos dice que Su gloria y sabiduría habitan en ella. En Pentecostés, Él envió a su Espíritu Santo para establecer la iglesia y Él la ha dotado con siervos ungidos, pastores, maestros, apóstoles, profetas y evangelistas; con el propósito de edificarla (ver Efesios 4:11-12).