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Devocionales en Español

Aquí está tu Dios Poderoso y Bueno

Tim Dilena

Una promesa nunca es mejor o peor que el carácter de quien la hace. La fe de un creyente nunca puede elevarse más alto que lo que él ve que es Dios. Si estamos sentados aquí cantando canciones de que vamos a ver una victoria, entonces la sangre nunca perderá su poder. Si estas son palabras y canciones que realmente creemos porque creemos en el carácter de Dios, entonces nuestra fe comienza a surgir con ello.

Una visión inadecuada de Dios tiene que resultar en una fe débil porque la fe depende del carácter de Dios y por eso es tan importante.

Sed Santos

David Wilkerson (1931-2011)

Tres meses después de que Israel salió de Egipto, llegaron a la base del monte Sinaí y establecieron un campamento. Moisés subió a la montaña escarpada para tener comunión con el Señor y Dios lo llamó diciendo: “Voy a venir a ti en forma de nube oscura para que la gente pueda oír cuando te hablo. Entonces ellos siempre te creerán. Baja y prepáralos para mi visita. Santifícalos”.

¿Serán Contestadas Alguna Vez mis Oraciones?

David Wilkerson

Yo creo en el tiempo del Espíritu Santo. Nuestras oraciones serán respondidas, de una forma u otra, en el tiempo de Dios. Sin embargo, a menudo tenemos miedo de someter nuestras oraciones al escrutinio del Espíritu Santo. Algunas de esas oraciones necesitan ser purgadas porque nuestra fe puede malgastarse en peticiones que no están maduras. No sabemos cómo orar “hágase tu voluntad” (ver Mateo 6:10). No queremos su voluntad tanto como queremos las cosas permitidas por su voluntad.

El Verdadero Significado de la Tierra Prometida

David Wilkerson (1931-2011)

Dios le dio a nuestro antepasado Abraham la tierra de Canaán “en heredad perpetua…” (Génesis 17:8). En hebreo, la palabra ´eterno´ significa interminable. Podrías pensar que Abraham tuvo que regocijarse por esto. Dios prometió a sus descendientes una patria permanente, hasta donde ellos podían ver, y duraría hasta la eternidad. Sin embargo, el Nuevo Testamento nos dice que el mundo será destruido por fuego, quemado completamente dejando de existir, después de lo cual el Señor traerá un cielo y una tierra nuevos.

Un Paso Adelante en la Batalla

Gary Wilkerson

Hay una brecha en nuestra comprensión de uno de los pasajes más importantes de la Biblia para los creyentes. Dios promete, incluso repetidamente, una vida abundante mucho más allá de lo que podemos imaginar. El problema es que estamos aquí abajo diciéndonos a nosotros mismos: “Oh, no estoy experimentando eso”.

Encontrando la Provisión del Señor

Carter Conlon

En 2 Reyes 7:1-2, Dios dio una palabra a través de Eliseo de que muy pronto la provisión estaría disponible y asequible para la tierra de Israel azotada por el hambre. El sirviente del rey respondió con incredulidad: "¿Podría ser esto?" En la Nueva Traducción Viviente, el sirviente dice: “¡Eso sería imposible aunque el Señor abriera las ventanas del cielo!”.

Uniéndonos al Club de los 7,000

David Wilkerson (1931-2011)

Elías, ese gran profeta, se había desanimado por el derrumbe moral que estaba experimentando su nación y había huido de las amenazas de la malvada reina Jezabel. Dios lo encontró escondido en una cueva en el monte Horeb y le preguntó: “Elías, ¿por qué te escondes?”.

Con indignación, Elías respondió: “Dios, he estado celoso de tu gloria, pero tu pueblo ha olvidado tu palabra, y tus ministros han sido perseguidos. Soy el único que queda, y ahora ellos también mi vida ".

De la Oscuridad a la Luz

David Wilkerson (1931-2011)

¿Qué se necesita para que dejemos nuestras miserables vidas de culpa y depresión? ¿No estás cansado de vivir una vida de miedo y tortura mental? ¿Aún no has aprendido que hay una mejor manera? ¿Qué se necesita para hacernos ver que nos espera una vida mucho más gloriosa?

Llamados desde Antes de la Creación

David Wilkerson (1931-2011)

El apóstol Pablo dice de Dios: “Quien nos salvó y llamó con llamamiento santo, no conforme a nuestras obras, sino según el propósito suyo y la gracia que nos fue dada en Cristo Jesús antes de los tiempos de los siglos” (2 Timoteo 1:9).

Toda persona que está “en Cristo” ha sido llamada por el Señor. Todos tenemos el mismo mandato: escuchar la voz de Dios, proclamar su Palabra, no temer nunca al hombre y confiar en el Señor ante toda prueba imaginable.