La Experiencia versus La Escritura

David Wilkerson (1931-2011)

Hace más de 150 años, el misionero George Bowen dijo: “Todas las experiencias humanas de los cristianos deben ser puestas a prueba por las Escrituras”.

Esta es una declaración poderosa y nos da una pausa para detenernos y hacernos algunas preguntas. ¿Pasan nuestros miedos cada vez más profundos la prueba de las Escrituras? ¿Pasa nuestra fe vacilante la prueba de las Escrituras? ¿Existe alguna forma de dudar que resista la misma prueba?

Dios es Galardonador

David Wilkerson (1931-2011)

De poco sirve la oración si no creemos plenamente que Dios es galardonador de los que le buscan diligentemente.

Yo estoy persuadido de que Dios se deleita en derramar generosamente bendiciones sobre sus amados hijos. David el salmista, insistió en que Dios es generoso e inclinado a la compasión, que su misericordia es grande y que es imposible para él rechazar a cualquiera que le implore su ayuda.

Entra en el Arca

David Wilkerson (1931-2011)

El 9 de abril de 1680, el gran predicador puritano John Owen pronunció el siguiente mensaje a su congregación: “Sabéis que durante muchos años, sin falta, os he estado advirtiendo continuamente de un tiempo calamitoso que se aproxima, y considerando los pecados que han sido las causas de ello… Les he dicho que el juicio comenzará en la casa de Dios, que Dios parece haber endurecido nuestros corazones por su temor… y que nadie sabe cuál será el poder de su ira.

Llamados a Ser Perfectos, No Perfeccionistas

Gary Wilkerson

La búsqueda de la excelencia es algo noble. Todos somos fanáticos de "convertirte en tu mejor yo". Los cristianos quieren la versión espiritual de eso: Sé la mejor persona en Cristo que puedas ser.

El problema es que este tipo de frase tentadora enturbia la línea entre ser bíblicamente perfecto y simplemente ser perfeccionista. Existe una gran diferencia.

Las Lágrimas de los Justos

David Wilkerson (1931-2011)

La Biblia declara enfáticamente que ninguna lágrima de sus hijos cae al suelo. David escribió: “Mis huidas tú has contado; pon mis lágrimas en tu redoma; ¿no están ellas en tu libro? Serán luego vueltos atrás mis enemigos, el día en que yo clamare; esto sé, que Dios está por mí” (Salmos 56:8-9). Las lágrimas de los justos son tan preciosas para él, que él las preserva. Si Dios guarda mis lágrimas, ¿no me guardará a mí?

Obediencia por Amor

David Wilkerson (1931-2011)

Cuando hablo de nuestro servicio a Dios, algunas personas protestan. ¿Me recordarías que eres un hijo y no un siervo? Entonces quisiera recordarles amablemente que Pablo ordenó a la iglesia: “Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús, el cual, siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse, sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres” (Filipenses 2:5-7).

Cuando Dios no se Mueve

Gary Wilkerson

Yo no diría que soy capaz de predecir el futuro de Estados Unidos en términos de si habrá otro gran avivamiento aquí o no. Esa es ciertamente mi esperanza y mi oración, y estamos viendo algunas inclinaciones que podrían conducirnos en esa dirección. Sin embargo, esto es lo que quiero que consideremos. ¿Qué pasa si el Señor nos da un llamado tipo Isaías?