Preciosos Ante sus Ojos
Siempre les he dicho a mis hijos: “Cuando estés en necesidad, cuando estés sufriendo, solo llámame. ¡Voy a estar allí! ¡No me importa dónde esté, vendré!” Si yo como padre terrenal amo tanto a mis hijos, piensen cuánto más se preocupa nuestro Padre celestial. ¿No responderá cuando lo llamemos?