SU PROMESA ESTÁ JUSTO ADELANTE
“Ustedes necesitan perseverar para que, después de haber cumplido la voluntad de Dios, reciban lo que él ha prometido” (Hebreos 10:36, NVI).
El escritor de Hebreos detecta al cansancio y la impaciencia arrastrándose dentro de los creyentes. Él quería abordar este asunto, al identificar para ellos, al arma más eficaz de Satanás contra aquellos que se cansan de hacer bien: La impaciencia para con Dios.