TRAIGO BUENAS NOTICIAS

David Wilkerson

"Está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y después de esto el juicio" (Hebreos 9:27). Como afirma la Escritura, nuestra vida aquí en la tierra es como la hierba (ver Salmos 102: 11). Un día estamos aquí, creciendo y prosperando, y al día siguiente estamos desapareciendo con la temporada. Somos como el vapor de la respiración que vemos en un día frío: aquí un momento y ya no más al siguiente. Y estoy convencido de que si pasáramos tan sólo un momento en la eternidad, nos haría darnos cuenta de cuán poco importante y fugaces han sido nuestros miedos presentes y pruebas.

FE PERSEVERANTE

David Wilkerson

Cada vez que enfrentamos aflicciones y persecuciones, Satanás viene a nosotros susurrando miedos y mentiras: "¿Cómo lograrás atravesar esta crisis? ¿Qué harás ahora? Si Dios es fiel, ¿cómo podría permitir que esto te suceda? ¿Cómo pudo poner a tus seres queridos en riesgo de esta manera? ¿Qué será de ti, de tu familia, de tu trabajo, de tu ministerio?"

JESÚS VINO A DESTRUIR LAS OBRAS DEL DIABLO

Gary Wilkerson

Tras ser atacado verbalmente por un hombre con un demonio, Jesús le dijo al demonio: "Cállate, y sal de él" (Lucas 4:35). En ese momento, el demonio derribó al hombre y salió de él sin hacerle más daño.

¿Cómo sería, hoy, si tuvieras la fe para creer que tu matrimonio ya no pudiera dañarse más? ¿Cómo sería si creyeras que tus hijos que se han alejado de Dios pudieran volver al Señor y conocerle?

CUANDO DIOS PROVEE

Nicky Cruz

Hay un alivio enorme al vivir bajo la guianza y provisión de Dios. Quita una tremenda preocupación de los hombros. No tengo que preguntar de dónde vendrá mi próxima comida o si voy a tener un lugar donde reclinar mi cabeza. Sé que Dios está en absoluto control y que nunca me ha defraudado.

EN UN LUGAR PELIGROSO

David Wilkerson

Algunos de ustedes que pasan por situaciones difíciles se encuentran en un lugar peligroso con su fe.

Debo preguntar: ¿Has permitido semillas de incredulidad en tu corazón? ¿Tiene serias dudas acerca de la fidelidad de Dios? ¿En lugar de adorarlo, dudas de él?

“¿Señor, por qué no has intervenido para mí? ¿Por qué has permitido tal confusión en mi matrimonio, en mi familia? Has puesto sobre mí más de lo que soy capaz de soportar”. Tal actitud puede conducir a un corazón endurecido y con el tiempo a una falta de vida espiritual.

VICTORIA IMPOSIBLE

David Wilkerson

Un mensajero trajo un informe espantoso a Asa, rey de Judá: ¡Un ejército de un millón de hombres se dirigía hacia ellos! Los etíopes y los libios habían unido sus fuerzas, y ahora este gran ejército iba hacia Judá, decidido a destruirla.

El día previo a esto, Asa había llamado al pueblo para dar gracias al Señor por la paz y las bendiciones que estaban disfrutando porque habían buscado a Dios. Y entonces leemos: "Y salió contra ellos" (2 Crónicas 14:9). De la noche a la mañana, Judá estaba en guerra, enfrentando a un millón de soldados hostiles.

DEJANDO QUE LA PAZ DE DIOS GOBIERNE

David Wilkerson

Dios, por su Espíritu, crea la paz, El hace que suceda, y la crea en ti.

No estoy hablando sólo de una paz con Dios. La paz que crea en ti es una conciencia tranquila, una paz que brota y fluye dentro, sanando, estabilizando y desarrollando confianza.

Cuando se tiene tal paz, dejas de tratar de jugar a ser Dios. Dejas de tratar de resolver tus problemas y los de los demás. Dejas de imaginar en tu mente lo que podría suceder, que alguna cosa horrenda podría llegar a ocurrir.

¡PAZ, PAZ!

David Wilkerson

“Produciré fruto de labios: Paz, paz” (Isaías 57:19). Esta es una de las promesas más alentadoras en la Palabra de Dios. El Señor dice que va a echar fuera de nosotros el espíritu de temor e implantará su espíritu sobrenatural de paz. Isaías repite aquí la palabra "paz" para hacer hincapié de que se trata de una paz continua.

El Espíritu Santo promete: "Voy a crear paz en ti". Una vez que experimentamos esta paz, se convertirá en una palabra creativa que fluya de nuestros labios hacia los demás.

EL DESTRUYE LOS PODERES DE LAS TINIEBLAS

Gary Wilkerson

Mientras Jesús estaba enseñando en la sinagoga, un hombre poseído con un espíritu maligno clamó: “¿Qué tienes con nosotros, Jesús nazareno? ¿Has venido para destruirnos?” (Lucas 4:34).

Observa la pregunta: “¿Has venido para destruirnos?”. Ahora si podemos decir que somos victoriosos, porque Jesús no solo interviene, sino que destruye.

MANTENER VIVO EL FUEGO

Jim Cymbala

La última carta que escribió Pablo fue para Timoteo, un joven ministro que él había ordenado. En la carta Pablo le dijo: "Por lo cual te aconsejo que avives el fuego del don de Dios que está en ti por la imposición de mis manos.Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio" (2 Timoteo 1:6-7). Tenemos una imagen de un fuego que está casi apagado, brasas que hay que avivar para mantener el fuego ardiendo. Pablo quería que Timoteo avivara las llamas del Espíritu.