HAMBRE DE LA PALABRA DE DIOS

Jim Cymbala

Como ya sabemos, la iglesia cristiana nació cuando el Espíritu Santo fue derramado. Sorprendentemente, en las horas que siguieron, miles de personas se convirtieron a la fe, y los nuevos creyentes cayeron en el nuevo ritmo inspirado de vida congregacional. “Y perseveraban en la doctrina de los apóstoles, en la comunión unos con otros, en el partimiento del pan y en las oraciones” (Hechos 2:42).

ORACIÓN PODEROSA

David Wilkerson

Jesús oró una "oración poderosa" en Getsemaní.

Pienso en la oración poderosa de Cristo como en la "oración final". Por final me refiero a la última de una serie de oraciones. A este punto, ya todo había sido tratado y esta era la oración última o final, la que movería montañas y sacudiría al infierno. Era simplemente esta: "Pero no sea como yo quiero, sino como tú" (Mateo 26:39, cursivas añadidas).

OBTENIENDO PODER Y AUTORIDAD

David Wilkerson

Cuando Cristo oró en Getsemaní, estaba demostrando a su pueblo cómo obtener poder y autoridad sobre todas las fuerzas satánicas. Cuando los discípulos trataron de expulsar a los demonios, esos espíritus infernales se rieron de ellos. Sólo cuando Jesús entró en escena los demonios huyeron. La única autoridad que reconocen es la de un corazón contrito y un espíritu quebrantado.

Consideremos ahora la oración de Jesús en Getsemaní:

IR A GETSEMANÍ

David Wilkerson

La audaz fe de Pedro le permitió caminar sobre el agua para llegar a Jesús en el mar. Pero cuando Pedro miró las olas crecientes en torno a él, empezó a hundirse, y de repente este discípulo intrépido entró en pánico y gritó: "¡Señor, sálvame!" (Mateo 14:30).

ESE MONTE PUEDE SER MOVIDO

David Wilkerson

“Porque de cierto os digo que cualquiera que dijere a este monte: Quítate y échate en el mar, y no dudare en su corazón, sino creyere que será hecho lo que dice, lo que diga le será hecho.” (Mark 11:23).

¡Jesús dijo que es posible mover el monte ante nosotros, pero que eso se lleva a cabo solamente a través la fe! Él nos da la gloriosa promesa de que todo lo que deseemos, cuando oramos y creemos, lo vamos a recibir. ¿Puedes creerlo?

 

¿REALMENTE LO CREES?

MAYORES OBRAS

Gary Wilkerson

“De cierto, de cierto os digo: El que en mí cree, las obras que yo hago, él las hará también; y aun mayores hará, porque yo voy al Padre” (Juan 14:12).

¿A qué se refiere Jesús cuando dice que haremos obras mayores que las que hizo Él? Encontramos una clave en la última frase de este versículo: “Porque yo voy al Padre”. ¿Que fue lo que pasó exactamente cuando Jesús ascendió al Padre justo después de su muerte?

UNA PROMESA INCREIBLE

Carter Conlon

El Salmo 37:25 es una promesa increíble para aquellos de nosotros que hemos sido designados para vivir en un momento de la historia que esta en contra de los cristianos! “Joven fui, y he envejecido, y no he visto justo desamparado, ni su descendencia que mendigue pan”. El justo nunca ha sido desamparado, ¡y te aseguro que no vas a ser la excepción!

LA PARTE MÁS DIFICIL DE LA FE

David Wilkerson

Cuando regresaba a casa, después de una gran victoria militar, el rey Asa, de Judá, fue interceptado por un profeta. Este hombre no venía a felicitar a Asa, sino a darle una advertencia: “Mientras tú dependas del Señor, confiando plenamente en Él, serás bendecido. Él caminará contigo y te dará victoria tras victoria. Pero si te apartas de Él, confiando en tu carne, tendrás desorden y caos en cada área de tu vida” (ver 2 Crónicas 15:1-6).

 

UN TIEMPO GLORIOSO

LA INCREDULIDAD NO ES UN ASUNTO LIGERO

David Wilkerson

La Escritura es clara respecto a que Dios no toma la incredulidad a la ligera. El Nuevo Testamento nos da un ejemplo de esto en la historia de Zacarías. En Lucas 1, Dios le prometió el milagro de un hijo al avejentado sacerdote, un hijo que sería el precursor del Mesías. 

El ángel Gabriel se le apareció diciendo: “Tu oración ha sido oída, Zacarías. Tendrás un hijo, y lo llamarás Juan”. Zacarías era un siervo fiel y devoto, que había orado toda su vida por la venida del Mesías. Él estaba quemando incienso en el templo cuando recibió estas noticias. 

 

LA MONTAÑA QUE ES UN OBSTÁCULO

David Wilkerson

Desde el comienzo Dios buscó un pueblo que viviera delante de Él sin temor. Él quería que Sus hijos estuviesen tranquilos en cuerpo, alma y espíritu, confiando completamente en Sus promesas. Dios llamó a esto: “Entrar en Mi reposo”. Por eso llevó a Su pueblo a un desierto desolado, donde no había agua, ni comida ni medios de subsistencia. Sólo le dio a Israel, Su promesa de que Él los guardaría. Su mensaje para Israel era simple: “Tened fe en Mí”. El los llamó a poner toda su confianza en Él, que Él haría lo imposible para ellos.