Convirtiéndonos en Dadores de Gracia
Dios puede usar ángeles para ministrar a la gente y los usa, pero sobre todo usa a sus propios hijos atentos para dar su gracia. Ésta es una de las razones por las que fuimos hechos participantes de su gracia, para convertirnos en canales de ella. Estamos destinados a dársela a otros. A esto llamo “gracia de la gente”.