A Jesús Nada lo Toma por Sorpresa
“Después hubo una gran batalla en el cielo: Miguel y sus ángeles luchaban contra el dragón; y luchaban el dragón y sus ángeles; pero no prevalecieron… Y fue lanzado fuera el gran dragon… fue arrojado a la tierra, y sus ángeles fueron arrojados con él” (Apocalipsis 12:7-9).
Estamos en una guerra entre dos poderes eternos: los principados y potestades de Satanás, y el único Hijo de Dios, Jesús. Esta guerra comenzó hace eones en el cielo con el arcángel Miguel y un ejército de ángeles que luchaban contra Lucifer y los ángeles rebeldes que se habían alineado con él.