DESVÍOS DE SU PLAN
¿Le preocupa realmente a Dios cuando nos desviamos del camino que Él ha establecido para nosotros?
¿Le preocupa realmente a Dios cuando nos desviamos del camino que Él ha establecido para nosotros?
"Y cuando Jesús vio que la multitud se agolpaba, reprendió al espíritu inmundo, diciéndole: Espíritu mudo y sordo, yo te mando, sal de él, y no entres más en él" (Marcos 9:25). Después de que Jesús oró, el muchacho cayó en tierra como muerto. Pero la Escritura dice: "Pero Jesús, tomándole de la mano, le enderezó; y se levantó" (versículo 27).
¿Puedes imaginar el gozo en esta escena? Este chico limpio y libre debió haber corrido a su padre para abrazarlo. Y el corazón del padre saltó de felicidad. Dios lo había arreglado todo.
En Marcos 9, un padre perturbado trajo a su hijo poseído a los discípulos de Jesús, buscando liberación. Este chico no estaba simplemente pasando problemas ni estaba siendo tan sólo rebelde. Él estaba lleno de espíritus malignos que controlaban todas sus acciones. Su estado era bastante conocido en dicha región y cuando los demás padres lo veían acercarse, lo más probable es que llevaran a sus hijos a casa.
No es suficiente que nosotros simplemente creamos en Dios como creador, el hacedor de todas las cosas. También debemos creer que Él es un Dios que anhela hacer lo imposible en nuestras vidas. La Biblia lo dice claramente: Sí no creemos esto acerca de Él, no confiamos en Él en absoluto.
Probablemente recuerdes el relato de Génesis en el que Dios se le apareció a Abraham. El patriarca estaba sentado en la puerta de su tienda durante el calor del día, cuando de pronto tres hombres aparecieron delante de él, parados debajo de un árbol. Abraham salió para encontrarse con ellos, les preparó comida y los recibió.
Durante su conversación, el Señor le preguntó a Abraham por su esposa Sara. Luego, Dios dijo algo increíble: "He aquí que Sara tu mujer tendrá un hijo" (Génesis 18:10).
Juan y su hermano Santiago eran discípulos de Juan el Bautista, el ferviente profeta conocido en toda la nación. Ellos trabajaban el negocio de pesca de su padre; de esta manera estos recios y duros hermanos recibieron el sobrenombre de "hijos del trueno". En otras palabras, casi nada los hacía rendirse.
Permítanme hacer una declaración audaz: el cristianismo no es una religión donde predomine la enseñanza. En la actualidad nos ha invadido prácticamente el culto al orador. La persona que pueda ponerse de pie y exponer doctrina correcta se percibe como esencial; sin un talento tal la iglesia no sabría qué hacer. La iglesia norteamericana ha convertido el sermón en la pieza central de la reunión, en lugar de que lo sea el trono de la gracia, donde Dios actúa en la vida de las personas.
¡El majestuoso Señor, que tiene todo el poder y la fortaleza, está de nuestro lado! Esto es lo que Jesús ha estado tratando de mostrarles a sus hijos todo el tiempo. Él dice: “¡Si pudieras comprender la grandeza de Dios y el hecho de que Él está de tu lado!”
“Serán luego vueltos atrás mis enemigos, el día en que yo clamare; Esto sé, que Dios está por mí” (Salmo 56:9).
“Jehová está conmigo; no temeré lo que me pueda hacer el hombre. Jehová está conmigo entre los que me ayudan” (Salmo 118:6-7).
“Así que, no temáis; más valéis vosotros que muchos pajarillos. A cualquiera, pues, que me confiese delante de los hombres, yo también le confesaré delante de mi Padre que está en los cielos. Y a cualquiera que me niegue delante de los hombres, yo también le negaré delante de mi Padre que está en los cielos” (Mateo 10:31-33).
David dijo: “Has aumentado, oh Jehová Dios mío, tus maravillas; y tus pensamientos para con nosotros, no es posible contarlos ante ti. Si yo anunciare y hablare de ellos, no pueden ser enumerados.” (Salmo 40:5).
Dios habló a los israelitas en la cautividad de Babilonia: “Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis” (Jeremías 29:11).
¡Dios pensó en ti antes de que nacieras! ¡Pensó en ti cuando tu vida era infundida a una célula…cuando aún estabas en el vientre!