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Devocionales en Español

Inspirados a Orar Con Fervor

Jim Cymbala

Aunque es crucial comprender los principios que rigen la oración, la comprensión por sí sola no te llevará a una gran victoria. De hecho, la falta de oración a menudo coexiste con un amplio conocimiento de la Biblia. Sólo el Espíritu Santo puede inspirarnos a orar de manera efectiva y él usa varios medios para lograr este propósito.

¿Eres Tú un Testigo en Tu Ciudad?

David Wilkerson (1931-2011)

A menudo esperamos que Dios se mueva en una de estas dos formas: Enviando un derramamiento sobrenatural de su Espíritu Santo para alcanzar multitudes en su reino, o enviando juicio para poner a las personas de rodillas o incluso destruirlas. Pero, amados, ese no es el método de Dios para cambiar las cosas en un día malo. Su forma de reconstruir ruinas siempre ha sido usar hombres y mujeres comunes a quienes él ha tocado. ¡Y lo hace llenándolos con su Espíritu Santo y enviándolos a la guerra con gran fe y poder! “Y fueron todos llenos del Espíritu Santo” (Hechos 2:4).

La Gloriosa Promesa de Paz de Cristo

David Wilkerson (1931-2011)

Jesús dijo: “La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo” (Juan 14:27).

Muchos cristianos tienen corazones turbados y algunos viven en temor, secretamente plagados de pánico, agitación y noches de insomnio. Para muchos, la paz va y viene, dejándolos preocupados, inquietos y maltratados por el estrés. Sin embargo, Zacarías profetizó que el Mesías vendría para “que, librados de nuestros enemigos, sin temor le serviríamos en santidad y en justicia delante de él, todos nuestros días” (Lucas 1:74-75).

Un Lugar de Reposo

David Wilkerson (1931-2011)

“Por tanto, hermanos santos, participantes del llamamiento celestial, considerad al apóstol y sumo sacerdote de nuestra profesión, Cristo Jesús; el cual es fiel al que le constituyó, como también lo fue Moisés en toda la casa de Dios” (Hebreos 3:1-2).

Una Revelación de la Misericordia de Dios

David Wilkerson (1931-2011)

David reconoció la gran misericordia de Dios cuando dijo: “He publicado tu fidelidad y tu salvación; no oculté tu misericordia y tu verdad en grande asamblea” (Salmos 40:10).

David estaba agradecido con Dios por su gran amor porque él era estaba profundamente consciente de sus propias fallas. “Me han alcanzado mis maldades, y no puedo levantar la vista” (40:12). No importa cuán horrible hayan pecado las personas, el amor de Dios aún los alcanza. Él envió a su Hijo como sacrificio, justamente con este propósito.

Una Fe Que Avanza

Gary Wilkerson

“Un hombre noble se fue a un país lejano, para recibir un reino y volver”  (Lucas 19:12).

Jesús cuenta la parábola de un noble que confió a algunos de sus sirvientes cantidades iguales de dinero para que administren, mientras él estaba de viaje. A su regreso, el Señor pidió una rendición de cuentas  a los sirvientes para evaluar qué tan fieles habían sido en su tarea.

Un Llamado a Gente Común

Carter Conlon

Mi corazón canta con la idea de que a lo largo de la historia de las Escrituras, cuando Dios quería hacer algo profundo, a menudo buscaba a la persona menos capaz de lograrlo. Cuando quiso traer un profeta a la nación, buscó un útero estéril en una mujer llamada Ana. Cuando quiso liberar a su pueblo de la mano de los madianitas, se le apareció a Gedeón, el menor de la casa de su padre en la tribu de Manasés.

Una Fe Que Prevalece

David Wilkerson (1931-2011)

En Números 13 y 14, encontramos el lenguaje y las definiciones de la verdadera fe e incredulidad. Los diez espías que habían subido a la tierra habían regresado con un informe de lo que habían visto. “Nosotros llegamos a la tierra a la cual nos enviaste, la que ciertamente fluye leche y miel; y este es el fruto de ella. Mas el pueblo que habita aquella tierra es fuerte, y las ciudades muy grandes y fortificadas” (Números 13:27-28). Entonces el informe fue tanto positivo como negativo.

¿Seguirás Su Dirección?

David Wilkerson (1931-2011)

“Te haré entender, y te enseñaré el camino en que debes andar; sobre ti fijaré mis ojos. No seáis como el caballo, o como el mulo, sin entendimiento, que han de ser sujetados con cabestro y con freno, porque si no, no se acercan a ti” (Salmos 32:8-9).

Moviendo el Corazón de Dios

David Wilkerson (1931-2011)

Sabemos lo que significa cuando oímos decir que las personas tienen “el toque de Dios” sobre ellos. Pueden ser simples hombres o mujeres según los estándares del mundo, pero han estado a solas con Dios y hablan con autoridad y convicción del Espíritu Santo. El profeta Daniel era un hombre así.