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Devocionales en Español

LA INSTIGACIÓN DEL DIABLO

David Wilkerson (1931-2011)

Probablemente estés familiarizado con la historia de Job en el Antiguo Testamento. Si es así, recuerda que Satanás no pudo tocar a este siervo piadoso de Dios sin antes obtener el permiso del cielo. El Señor le dijo al diablo que podía afligir el cuerpo de Job, que podía llevarlo a través de duras pruebas, pero que no podía matarlo.

“¡ELLOS HABÍAN ESTADO CON JESÚS!”

David Wilkerson (1931-2011)

Poco después de la resurrección de Jesús, Pedro y Juan se encontraron con un mendigo lisiado a las afueras de la puerta del templo donde iban a adorar. Este hombre era llevado a la puerta todos los días para ganarse la vida mendigando y les pidió limosna a Pedro y Juan. Pedro respondió: “No tengo plata ni oro, pero lo que tengo te doy; en el nombre de Jesucristo de Nazaret, levántate y anda” (Hechos 3:6). El hombre fue sanado instantáneamente y en complete gozo comenzó a correr por el templo, saltando y gritando: “¡Jesús me sanó!”

LA SEGURIDAD DEL ATENTO CUIDADO DE DIOS

David Wilkerson (1931-2011)

David oró: “Guárdame, oh Dios, porque en ti he confiado” (Salmos 16:1). La palabra hebrea que David usa para “guardar” en este versículo está repleta de significado. Dice, en esencia: “Pon un cerco alrededor de mí, un muro de espinas protectoras. Guárdame y protégeme. Observa todos mis movimientos, todos mis idas y venidas”.

EL SEÑOR OYE TUS ORACIONES EN LO SECRETO

Gary Wilkerson

“Mas tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público” (Mateo 6:6).

Necesitamos comprender la profundidad y el poder de lo que Jesús está diciendo aquí cuando habla de que el Padre ve en lo secreto. Podemos hacer oraciones religiosas con la esperanza de ser vistos como maravillosos santos, pero Dios no sólo no oye esas oraciones, sino que ni siquiera se da cuenta de que estamos orando.

​LA BENDICIÓN DE DIOS ES INVENCIBLE

Jim Cymbala

Estoy convencido de que Dios desea derramar sus bendiciones sobre cada iglesia y cada creyente que ora fervientemente por ellos.

Vemos en la Biblia que la bendición de Dios es un reflejo de su increíble amor por su creación. Si bien es invisible en su esencia, su bendición es invencible, superando todo lo que la tierra o el infierno pueda lanzar contra ella. Esta bendición tiene sus raíces en las antiguas instrucciones que Dios le dio a Moisés para que las llevara a cabo el sumo sacerdote de Israel:

UN LUGAR DEL REPOSO PERFECTO

David Wilkerson (1931-2011)

Existe un lugar en Cristo donde no hay ansiedad acerca del futuro, no hay miedo a la calamidad, a la aflicción o al desempleo. Y no hay miedo de caer o desfallecer. Este lugar de confianza total en la fidelidad de Dios se llama un lugar de reposo perfecto por el escritor de Hebreos.

¡UNA VIDA QUE SATANÁS NO PUEDE DESTRUIR!

David Wilkerson (1931-2011)

Mientras Jesús estaba en silencio en la tumba después de su crucifixión, Satanás y sus hordas se relamían. Ellos pensaron que habían ganado una victoria irreversible, pero todo el tiempo, el plan pre ordenado de Dios estaba siendo puesto en acción: ¡un plan para una vida de resurrección!

El Señor envió su Espíritu Santo a las mismas entrañas de la muerte y allí vivificó el cuerpo de Jesús, resucitándolo de entre los muertos. Luego salió de la tumba nuestro bendito Salvador, justo a través de la gruesa piedra. Y él emergió con este testimonio:

¿ESTAMOS DISPUESTOS A QUE NUESTRA FE SEA PURIFICADA?

David Wilkerson (1931-2011)

Amado, Dios está buscando un pueblo que confíe plenamente en él. El Señor no nos salvó para que pudiéramos deleitarnos eternamente en su bondad, misericordia y gloria. Él tuvo un propósito eterno al elegirnos a cada uno de nosotros y ese propósito va más allá de las bendiciones, el compañerismo y la revelación. El hecho es que Dios sigue extendiéndose hacia la humanidad perdida, en busca de personas con fe, que él puede moldear hasta convertir en su herramienta más grande de evangelización.