Debemos admitir que moriremos de hambre espiritualmente y nos volveremos débiles e indefensos si no regresamos todos los días a Dios, para escuchar del Espíritu y absorber sus promesas.

Dios quiere que yo crea totalmente en él y en su poder sobre el pecado y la muerte. ¡Mi parte es creer que Dios me sacará victorioso de la batalla!

Healthy habits and caring for your body and mind will reap lifelong benefits for you, your loved ones and those you serve.

Al creer en las promesas de salvación de Dios, los cristianos se vuelven partícipes de la naturaleza divina. ¿Cómo? Confiando cada vez más en Dios y haciendo crecer nuestra fe.

La resurrección de Jesús, acompañada de una proclamación divina de que verdaderamente era el Hijo de Dios, abrió el camino para todos hacia una vida nueva y abundante en él.

Los creyentes deben dejar de pensar en cómo salir de los problemas. En cambio, debemos descansar en el poder de la Palabra de Dios y dejar que el Señor ponga gozo en nosotros hoy.

El diablo envía zorras pequeñas a nuestras vidas para hacernos pensar que no tenemos remedio y que Dios está enojado con nosotros, pero podemos vencer estas tentaciones y pensamientos terribles con la oración.

Alguien no recibe el Espíritu Santo hasta que se le permite tomar el control total de nuestros corazones y mentes, y esto debe implicar una práctica de por vida de someternos a él.

Cuando los hijos de Dios están en medio de pruebas y dificultades, debemos elevar alabanzas y las bendiciones descenderán.

Lo que debemos entender es que cuando Dios se demora en responder la oración, podemos estar seguros de que está obrando en los corazones de todas las personas afectadas por la situación.