Un Vistazo al Corazón de Jesús
Creemos que nuestro Señor disfruta lo suficiente de lo que hacemos por él, pero hay mucho más. Considera este versículo: “¿Quién de vosotros, teniendo un siervo que ara o apacienta ganado, al volver él del campo, luego le dice: Pasa, siéntate a la mesa? ¿No le dice más bien: Prepárame la cena, cíñete, y sírveme hasta que haya comido y bebido; y después de esto, come y bebe tú?” (Lucas 17:7-8).