¿Por Qué Debería Perdonarlos?
Estaba leyendo Reflexiones sobre los Salmos de C.S. Lewis, y él escribió allí: “No sirve de nada hablar como si el perdón fuera fácil. Todos conocemos el viejo chiste: “Has dejado de fumar una vez; he renunciado a él una docena de veces”. De la misma manera, podría decir de cierto hombre: “¿Lo he perdonado por lo que hizo ese día? Lo he perdonado más veces de las que puedo contar”. Porque descubrimos que el trabajo del perdón tiene que hacerse una y otra vez.