Cristo Ha Ganado la Batalla
En los últimos meses, he leído muchas cartas lamentables de creyentes que todavía están atados por hábitos pecaminosos. Multitudes de cristianos que luchan escriben: “No puedo dejar de apostar… Estoy en las garras del alcoholismo… Estoy teniendo una aventura y no puedo cortarla… Soy un esclavo de la pornografía”. En carta tras carta, estas personas dicen lo mismo: “Amo a Jesús y le he rogado a Dios que me libere. He orado, llorado y buscado el consejo de Dios. Pero simplemente no puedo liberarme. ¿Qué puedo hacer?”