UNA CONSPIRACIÓN DE INTERRUPCIONES
Escuchamos mucho sobre las conspiraciones en nuestra sociedad, esquemas destinados a destruir tanto la democracia en América como el cristianismo. El corazón de Dios no está preocupado por tales conspiraciones, pero hay una conspiración que sí tiene que ver con nuestro Padre celestial. Es satánica y está dirigida directamente a los cristianos que han puesto sus corazones en entrar en la plenitud de Cristo.