Abriendo las Ventanas del Cielo
Dios es capaz de responder las oraciones de sus hijos, pero él quiere hacer por nosotros mucho más de lo que podemos imaginar. Él quiere respondernos según sus riquezas y su poder.
Dios es capaz de responder las oraciones de sus hijos, pero él quiere hacer por nosotros mucho más de lo que podemos imaginar. Él quiere respondernos según sus riquezas y su poder.
Cuando Israel sólo oró por una victoria, Dios tenía algo más en mente. Él derramó su bendición sobre ellos y quiere hacer lo mismo con su pueblo hoy.
El amor en cualquier circunstancia es un riesgo, pero cuidar a un niño tierno cuya vida entera se ha consumido simplemente sobreviviendo requiere un compromiso con ese amor.
Jesús habló específicamente de tres disciplinas personales que deberían ser parte de la vida de todo cristiano: dar, orar y ayunar.
Lo único que los creyentes suelen pedir es misericordia, perdón y aceptación. En cambio, Dios quiere abrir las ventanas de los cielos y derramar bendiciones más allá de nuestras más extremas esperanzas.
La iglesia de Jesucristo nunca verá lo que Dios tiene para su cuerpo hasta que nos vea buscándolo seriamente, así que avancemos celosamente hacia el Señor.
Este poema y versos se combinan como un recordatorio del profundo amor de Dios y las promesas específicas a sus amados hijos.
Dios está llamando a sus hijos hoy para que apartemos la vista de nuestras circunstancias. No deberíamos intentar resolverlo todo ni dejar que el miedo nos derribe. ¡Dios se encontrará con nosotros en la oración!
El hambre de un creyente por conocer mejor a Jesús cada día supera todo lo que somos y todo lo que hacemos. A través de las exigencias de la vida moderna, debemos permanecer cimentados en Dios.
La cultura cristiana occidental está hambrienta de autenticidad bíblica producida por discípulos vivos y el camino hacia ese tipo de vida es el arrepentimiento bíblico genuino.