El Mensaje que No Cambia
Vivimos en una era en la que muchas personas que afirman conocer a Dios y seguir las Escrituras son en realidad lobos que plantan semillas de duda y desprecian a quienes se esfuerzan por obedecer el mandato de la Biblia: “Procura con diligencia presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué avergonzarse, que usa bien la palabra de verdad” (2 Timoteo 2:15).